1361. 16 de marzo. Iglesia de Fresne.
Haz lo que puedas, pues Yo nunca te pediré más. Y que todo, lo mismo el trabajo que el reposo, sea por amor; amor cuya prueba será la alegría. Yo Soy siempre el mismo y todos los estados de un ser deben inclinarse hacia Mí. Es una manera de reconocer Mi Justicia y Mi Misericordia.
No podrías tú creer cuánto Me agrada que vosotros tratéis de asemejaros a Mí. No creas que puedes ser ni buena ni humilde por ti misma; son Mi Bondad y Mi Humildad lo que te inspira y quien se parece a Mí, agrada al Padre. El dijo una vez, como recordarás, 'Este es Mi Hijo muy Amado', y cada uno de vosotros es 'Su' hijo cuando se parece a Mí. No es diferente de lo que a ti misma te pasa. ¿No es verdad que sientes simpatía inmediata por una persona que te recuerda el rostro o la voz de una amiga querida?
Multiplica las semejanzas en los relaciones con el Padre y con tu prójimo. Piensa seguido en tu hermano Mayor, cuya Vida conoces al detalle. Obra con la simplicidad con que El obraba, con el mismo amor hacia los niños y los pequeños. Camina sin temor, Yo estoy contigo. Lo principal es que tengas la intención de imitarme. Una intención que es preciso purificar constantemente y mantener en Mi Presencia como la lamparita del Sagrario. Intención de agradarme, de hacerme compañía, de consolarme.
Hace unos momentos Me ofrecías una de las primeras violetas, diciéndome: ‘Señor, ¿nadie ha pensado hoy en traerte una?' una violeta era poca cosa, mas para Mí fue mucho, porque en la Tierra se Me tiene como un desterrado. ¡Y Soy el Rey del Cielo!
Dame las gracias por haberte hecho ese don inapreciable que es la Fe y esfuérzate por hacerla crecer: será como si Me hicieras crecer en ti.
Gabriela Bossis (1874-1950) fue la menor de cuatro hijos en una familia católica francesa que la educó cristianamente. Se diplomó en enfermería y sirvió como tal en las misiones de Camerún, por lo que fue condecorada. Fue una persona abierta y comunicativa muy entregada a Cristo, pero que no sintió la vocación religiosa. En 1923 escribió su primera comedia, alcanzó celebridad por obras entretenidas y edificantes que se estrenaron en numerosos países, incluso interpretando ella algún papel. En 1936 comenzó a transcribir sus diálogos con el Señor, una experiencia mística que vivió durante años. Fue dirigida espiritualmente por varios sacerdotes, que dieron luego testimonio de su paz interior. En uno de sus cuadernos escribe las siguientes palabras que escuchó de Cristo: "Tú has estado siempre bajo mi dirección". Todos esos escritos se agruparon en volúmenes agrupados bajo el título Él y yo. Murió después de experimentar durante varios meses dolencias respiratorias y pérdida de visión, que sobrellevó con el mismo espíritu de conformidad con la voluntad de Dios que guió toda su vida.