Hasta este mes de febrero, las cinco monjas que quedaban en el monasterio segoviano de San Vicente el Real eran las herederas de casi un milenio de historia y presencia de la Orden Cisterciense de la Común Observancia en el enclave. Con su traslado a Madrid, además de clausurar el monasterio más antiguo de la diócesis, se confirma una preocupante tendencia a la irrelevancia vocacional tanto en Segovia como en toda España.
Y es que las religiosas de San Vicente el Real no son las únicas que se ven obligadas a abandonar sus monasterios por ausencia de vocaciones y remplazo generacional.
En 2021 también fue clausurado el monasterio de clarisas de San Antonio el Real y el de franciscanas de San Juan de Dios. Los monasterios masculinos corren en esta localidad la misma suerte, siendo el convento franciscano de San Francisco, el de Carmelitas calzados de Nuestra Señora del Henar cerrados en 2006 y en 2020.
Según datos del obispado de Segovia, en 2012 había 145 religiosas presentes en la diócesis y tan solo diez años después, la cifra se reduce a 90, a las que habría que restar las 4 de San Vicente el Real cuando completen su marcha: en los últimos 10 años, las religiosas presentes en Segovia han disminuido en más del 40%.
La crisis no es exclusiva de Segovia. "Es el mismo descenso que están experimentando todas las diócesis de España y que afecta, sobre todo, a las congregaciones que podríamos llamar históricas, que existen desde hace muchísimo tiempo", afirma Juan Cruz Arnanz, portavoz del Obispado de Segovia al diario El norte de Castilla.
200 comunidades suprimidas en 20 años
Según el portal Divina Vocación, que reúne la clausura de monasterios y conventos en España entre los años 2000 y 2022, más de 200 comunidades monásticas han sido suprimidas canónicamente en toda España.
En lo que podría llamarse un "desierto vocacional", las Carmelitas Samaritanas destacan por su rápido crecimiento y su juventud, con una media de edad que no supera los 33 años.
Preguntado por el marcado descenso de la población conventual, Arnzanz explica que si bien "la mayoría de religiosas son muy mayores" -con algunas excepciones- y que "cada vez hay menos familias que tienen más de uno o dos hijos" la cuestión demográfica no es la única causante de la presente situación.
"La vida contemplativa es una vida escondida en un mundo en el que se lleva todo lo contrario, exhibirse, y por otro lado estamos hablando de un compromiso vital. Muchas de las religiosas que habitaban nuestros conventos tienen alrededor de 80 años y llevan más de 60 en clausura. Esto no es fácil de entender en un mundo como el actual", menciona.
El envejecimiento del clero, la ausencia de vocaciones y la falta de remplazo generacional son tres elementos que impiden el crecimiento de religiosos en España.
En el caso de las vocaciones sacerdotales, el de Segovia vuelve a ser un caso representativo. Según el Nomenclator de la Conferencia Episcopal, tiene una población de 153.000 personas y 337 parroquias, que debían ser atendidas por 144 sacerdotes diocesanos -71 de ellos jubilados-, lo que supone que muchos de ellos tienen que atender tres o más parroquias.
Mientras, la misma diócesis tuvo que esperar desde 2010 hasta 2020 para ver ordenado un nuevo sacerdote en la catedral, Álvaro Marín. En ese mismo tiempo fallecieron 47 sacerdotes.
Semejante es el caso de las dominicas contemplativas del monasterio de Santo Domingo el Real, quienes en junio de 2021 dieron la bienvenida a Sor Evelyn del Niño Jesús, una joven religiosa conversa a la Orden de Predicadores tras su llegada a España.
Sin embargo, también hay signos de esperanza. Es el caso de las Carmelitas Samaritanas. Hablamos de ellas el pasado noviembre, con motivo de una entrevista realizada a su superiora, la madre Olga María del Redentor, y no son pocos los medios locales que reconocen su carácter "repoblador" de otros monasterios abandonados. Es el caso, en Segovia, de la Fuencisla y el Henar. Las Carmelitas Samaritanas no son solo un signo de esperanza por ocupar monasterios vacíos, sino también por su juventud: la orden no supera los 33 años de edad media.