Es habitual que cuando se da un proceso electoral la asociación E-Cristians ofrezca una reflexión sobre el voto con criterio católico.
También ante las elecciones municipales, regionales y europeas de este fin de semana se pronuncia esta asociación fundada en 2001 en Barcelona para promover la presencia cristiana en el debate social y la vida pública.
Criterios de E-Cristians para ayudar al discernimiento del voto en las elecciones municipales y europeas
Como en las otras contiendas electorales, E-Cristians hace públicos algunos criterios para contribuir a la reflexión personal en el ejercicio del voto, consecuentes con la doctrina social de la Iglesia, que es el fundamento de nuestra acción.
En este caso tenemos elecciones municipales y europeas, cada una con sus peculiaridades:
1. Las elecciones municipales responden fundamentalmente a criterios locales, a las personas más que a las etiquetas de partido, especialmente en los núcleos pequeños. Valorar las virtudes cívicas de los candidatos es criterio básico.
2. Es prioritario considerar qué lista electoral acoge mejor en su proyecto y también en su talante los contenidos de la doctrina social de la Iglesia, y lo hace además de forma equilibrada.
3. Queremos señalar como cuestiones básicas en las condiciones concretas en las que vivimos:
- La lucha contra la pobreza, y para la promoción del trabajo digno. Una especial atención a la pobreza infantil que es mucho más que la alimentación, y al derecho de toda persona a disponer de un hogar.
- La reducción de la excesiva desigualdad social, y la superación del trabajo precario.
- Actuar contra toda forma de discriminación, y en especial las que menos están presentes en los medios de comunicación: mujeres embarazadas, viudas, personas mayores de 50 años desempleadas, inmigrantes, pobres, entre otros.
- También una especial atención a las personas dependientes de acuerdo con el principio de que todo dependiente debe ser atendido de acuerdo con sus necesidades.
- La extensión de los cuidados paliativos al 100% de la población. Hay que promover políticas de acompañamiento a personas solas al final de la vida. La afirmación del derecho a la vida digna desde la concepción hasta la muerte natural, como fundamentos de una sociedad humana.
- Aplicar el principio de subsidiariedad a favor de las entidades y de manera especial de las familias, evitando que las subvenciones y otras formas de colaboración sean instrumentos de dominio partidista.
- Ser un municipio favorable a la familia, y en especial a las familias con hijos, promover el derecho de los padres a la educación moral y religiosa de los hijos. Ayudar a través de los servicios sociales y otras medidas a la estabilidad del matrimonio.
- Crear condiciones para que la experiencia religiosa y la presencia del hecho religioso se hagan presentes. Normalizar la presencia de la concepción cristiana en la vida política.
- Evitar que la política y los recursos municipales estén al servicio de ideologías partidistas, como entre otras la ideología de género.
- En general, fomentar una política local basada en la solidaridad, la reciprocidad, la amistad civil, la participación y el bien común, que no es un abstracto universal, sino la construcción de condiciones concretas que hacen posible que las personas desarrollen sus proyectos de vida, y beneficien a la comunidad.
- Hay que tener en cuenta también qué opciones hacen del respeto al medio ambiente, la lucha contra el cambio climático y la contaminación, uno de sus puntos importantes.
- Finalmente, en el entorno actual de la política catalana, hay que valorar aquellas formaciones que fomentan la concordia y que huyen del enfrentamiento y el lenguaje beligerante contra quienes piensan diferente.
Respecto a las elecciones europeas, son válidas todas las afirmaciones anteriores pero hay que añadir que su naturaleza europea significa que en realidad al votar la candidatura escogida aquí está optando por uno de los grupos a escala europea que componen el Parlamento de Estrasburgo, Partido Popular Europeo, Partido Socialista, grupo Liberal (ALDE), Los Verdes, etc. En este sentido es básico informarse a qué grupo se dirige nuestro voto personal, quien integra ese grupo, qué candidato presenta a la presidencia de la Comisión Europea, como cuestiones básicas para guiar nuestra opción.
El Parlamento y la Comisión Europea tienen importantes competencias que inciden en nuestra vida cotidiana. Son un fin en sí mismas, o no deben ser vistas como la segunda vuelta de nada, o como un voto de castigo, que no utilizarías en unas elecciones al Parlamento.
Para los cristianos, es un deber la construcción europea desde la perspectiva que se quiera, mientras sea compatible con la doctrina social de la Iglesia.
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Gran cita de E-Cristians una semana después de votar
Una semana después de las elecciones, el sábado 1 de junio, a las 9.15 horas, E-Cristians celebra su asamblea abierta anual, de entrada libre. Suele ser una ocasión para que cristianos de distintas tendencias pero que reconocen la doctrina social de la Iglesia y se interesan por el debate social se reúnan y compartan ideas.
Este año bajo el lema es: ¡Cristianos, a la política!
El encuentro concluirá en torno a las 14.00 horas y es de asistencia libre, previa inscripción. Tendrá lugar en Barcelona, en la parroquia de Nuestra Señora del Pilar (calle Casanova, 175). ( Pinche aquí para conocer el programa e inscribirse).
(Lea también aquí en ReL El voto de los católicos, de Rafael Sánchez Saus)