El Consejo de Ministros de este viernes acordó "declarar el 28 de junio como Día del orgullo LGBTI" como muestra del "reconocimiento y protección" del Ejecutivo de Pedro Sánchez con "la población LGBTI" (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersexuales).
Además, el Gobierno "promoverá la lucha contra la discriminación por identidad de género u orientación sexual en las aulas", lo que en la práctica de las medidas ya implementadas en ese sentido se traduce en una intensificación del adoctrinamiento de los niños y adolescentes en la ideología de género y la normalización activa de las relaciones homosexuales.
La ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Isabel Celáa, anunció además en la rueda de prensa posterior al Consejo que volverán a financiarse con fondos públicos los tratamientos de reproducción asistida a mujeres solas y parejas lesbianas. A partir de 2014, una decisión de la entonces titular del Ministerio, Ana Mato, vinculó la oferta de dicho servicio por el Sistema Nacional de Salud a razones exclusivamente médicas, esto es, la existencia de un problema de esterilidad.
Algunas comunidades autónomas, entre ellas Andalucía, de donde ha sido consejera de Sanidad la actual ministra del ramo, Carmen Montón, asumieron ese coste extendiendo el servicio por razones ideológicas, esto es, la pretensión de que se financien técnicas de reproducción asistida a personas que podrían tener hijos mediante reproducción natural.
De ahí que el mismo Ejecutivo socialista haya vinculado esta nueva cobertura de la Sanidad pública, no a razones asistenciales sino, en palabras de la propia portavoz, a la celebración esta semana del Orgullo LGTBI, y como "un apoyo a la diversidad" al que quiere sumarse el Ejecutivo.