El arzobispo de Tarragona, Jaume Pujol Balcells, ha sido el único obispo catalán ausente en la misa de la Sagrada Familia de Barcelona porque casi a la misma hora, las once, celebraba en la catedral tarraconense otra misa por las víctimas de los atentados yihadistas de Cataluña, especialmente por los heridos y la veraneante asesinada en Cambrils, población que pertenece a su diócesis.
El arzobispo Pujol ha hecho un llamamiento a la sociedad para que no se paralice "por el miedo ni por la aflicción" tras los atentados (si bien Tarragona ha cancelado sus fiestas patronales de Sant Magí).
En la misa solemne en la catedral de Tarragona ha constatado cómo "estamos todavía consternados por las numerosas víctimas mortales, así como por las decenas de heridos que han causado los terribles atentados terroristas" en Barcelona y en Cambrils, en nuestra archidiócesis".
Y ha añadido: "Vamos conociendo poco a poco los nombres de las personas a quienes los asesinos han arrebatado la vida. Hombres y mujeres de nuestro país y muchos de todo el mundo, porque el mal no se para ante las fronteras". De hecho, de 15 víctimas mortales, 3 eran catalanas (si contamos al joven de Vilafranca del Penedés hallado en su coche), 2 eran de otras regiones de España y 10 eran extranjeros.
Tras recordar el "dolor inmenso" por "la barbarie de este atentado, y el desprecio que significa por la vida humana y su dignidad", se ha centrado en la reacción de mucha gente ante esta "acción tan inhumana", en palabras del Papa, expresada con el grito "No tenemos miedo".
"No podemos quedar paralizados ni por el miedo ni por la aflicción", exhortó el arzobispo de Tarragona, y pidió en su homilía que los terroristas "se conviertan a pesar del mal inmenso que han hecho", según recoge agencia Efe.
(El cardenal Omella no habló de la conversión de los terroristas en su homilía en Barcelona pero sí se pidió en la oración de los fieles que se arrepintieran y trabajaran por el bien).
Asimismo, Pujol ha pedido a Dios que los heridos recobren la salud y ha agradecido el trabajo "abnegado" de los miembros de los cuerpos de seguridad, así como también de las autoridades, del personal sanitario de los hospitales que atienden a los heridos y de tantos voluntarios que se han volcado en la ayuda a los afectados.
Por último, el arzobispo de Tarragona ha informado de que ha recibido el pésame de los obispos de Cataluña, del presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez, y de muchas personas, y ha hecho suyas las palabras del papa Francisco sobre "seguir trabajando con determinación por la paz y la concordia en el mundo".