Contra todo pronóstico el equipo del Valencia Basket se ha proclamado campeón de la Liga ACB tras vencer con claridad al Real Madrid. Y tras recibir el trofeo, el club acudió a la Basílica de la Virgen de los Desamparados para ofrecer a la Mare de Déu su triunfo en la Liga ACB Endesa y fue recibido por el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares.

Tal y como recoge AVAN, el Arzobispo expresó su "felicitación más sincera y de todo corazón" a todo el club, jugadores, técnicos, directivos y afición -allí presentes, en la misma Basílica, completamente abarrotada- y les agradeció su "buena temporada" y ser "deportistas entregados enteramente a su tarea".

Igualmente, les deseó "que no sea ésta simplemente la primera vez sino que se multiplique en años sucesivos con nuevos triunfos". "Habéis venido además a traer este título, estas flores, a la Mare de Déu, que sin duda alguna ha estado con vosotros", según el Arzobispo que les aseguró que "habéis sido buenos hijos y Ella os recibe ahora con los brazos abiertos". "Tened seguridad" porque su "protección y amor" está con todos vosotros, añadió.




A continuación, el capitán del equipo, Rafa Martínez, leyó una oración en la que destacó los valores que conlleva el deporte. "Que nuestro entusiasmo sirva para favorecer en los jóvenes la afirmación de valores importantes", entre los que enumeró la lealtad, perseverancia, la amistad, la comunión, la solidaridad y el esfuerzo. "Sabemos, Madre, la gran responsabilidad que tenemos los deportistas, estamos llamados a convertir el deporte en ocasión de encuentro y diálogo superando cualquier barrera de lengua, raza, religión, y cultura", imploró el capitán del equipo. "Queremos, Virgen María, que nuestro deporte sea una valiosa aportación al entendimiento pacífico y que se consolide un mundo más fraternal y humano". "Ayúdanos a poner en la superación personal el mismo empeño que ponemos en el deporte". Igualmente, ha expresado su deseo de ofrecer este título a cuantos les han apoyado y ayudado a ser un equipo mejor.

Tras estas palabras, la afición, club, y fieles presentes ovacionaron al equipo con un continuo aplauso y tras rezarle a la Virgen de los Desamparados todos juntos, los jugadores le ofrecieron el título a la Mare de Déu mientras se cantaba el Himno de la Coronación. Finalmente, todo el equipo salió de la Basílica entre aplausos, saludos, y vítores de "Vixca Valencia Basket".