Los primeros niños que leían Aguiluchos (www.aguiluchos.net), la revista misionera infantil de los Misioneros Combonianos en España, hoy ya son abuelos. ¡Unos cuantos se hicieron misioneros! Muchos otros, aprendieron a apoyar a los misioneros desde España

Aguiluchos cumple 60 años, muy viva. Cuando empezó, tenía una tirada de 3.000 ejemplares. Hoy es de 18.000 ejemplares: todo un esfuerzo por llegar a los niños. Cada ejemplar tiene unas 68 páginas y se envían 11 ejemplares al año. La suscripción anual cuesta 24 euros




Este jueves 11 de mayo a las 19 horas se celebra en Madrid un acto conmemorativo en el que participarán algunos de los directores, redactores jefe y colaboradores de la revista.

También se han organizado exposiciones que recorren la historia de la revista, y en las que se puede descubrir África con Aguiluchos. Estas exposiciones pueden ser solicitadas gratuitamente por colegios, parroquias e instituciones.

La revista infantil nació en enero de 1957. La idea se fraguó un año antes, en la semana Misionera de Burgos, celebrada en agosto de 1956, en la que participaba el misionero comboniano Enrique Bartolucci. Este comboniano, que 20 años después fue nombrado obispo de Esmeraldas (Ecuador), estaba convencido de la necesidad de fundar una revista misionera en España destinada a los niños, como ya hacían los misioneros combonianos en Italia con la revista "Piccolo Missionario".



En su primer editorial se explica el por qué del nombre. Los aguiluchos “extienden las alas hacia el azul y fijan sus ojos en el sol. Aman las alturas y los panoramas inmensos. Son el símbolo de los muchachos generosos, de lo que tienen un corazón grande como el mundo y sueños sin fin como el cielo. Solamente con ellos contamos al iniciar este experimento audaz”.

Big Bombo y la Jungla Band, un popular cómic de Aguiluchos, aquí