"Somos ateos pero explicaremos a nuestros hijos que nuestros amigos creyentes rezaron por ellos. Nos consta que la Virgen del Tránsito, Santa Rosa de Viterbo y Santa Maria Liberatrice fueron interpeladas (y nunca se sabe...) Hay pocos gestos de amor y amistad más hermosos. Enseñaremos a nuestros hijos que sean siempre respetuosos con el que piensa distinto porque la humanidad, la decencia y la amistad no son el patrimonio exclusivo de ninguna causa. El nudo que tenemos en la garganta nos ha empujado a escribir para dar las gracias a quienes nos han ayudado a llegar hasta aquí".
Así agradecen en una nota Pablo Iglesias, líder de la formación populista Podemos, y su compañera diputada y madre de sus hijos, Irene Montero, las oraciones de las personas de fe que han rezado por sus hijos Manuel y Leo, que nacieron prematuramente.
Entre ellos, está el escritor católico Juan Manuel de Prada, que anunció sus oraciones en este texto conmovedor (y reflexivo sobre el aborto y los bebés). El intelectual sorprendió positivamente al político en una entrevista previa en su programa de TV La Tuerka, en junio.
Las intercesoras ante Dios
Santa Rosa de Viterbo es una terciaria franciscana italiana (es decir, laica) que murió con apenas 18 años en el siglo XIII. En España no tiene mucha devoción, aunque es patrona de la juventud franciscana, de Alcolea en Almería y de La Graña, cerca de El Ferrol.
La Virgen del Tránsito es la advocación de la Virgen María que es patrona de Zamora, la ciudad originaria de Pablo Iglesias. Según la leyenda, fue tallada en el siglo XVI-XVII por unos ángeles que se hicieron pasar por peregrinos a Santiago en la casa de unas clarisas llegadas a la ciudad desde Gandía.
Santa María Liberatrice es el nombre de un templo iniciado en Roma por León XIII (el Papa de la cuestión social), y luego encargada en 1904 a los salesianos de Don Bosco, devotos de la Virgen María como Auxilio de los Cristianos. Quien haya rezado a la Virgen bajo esta advocación, probablemente lo ha hecho en este templo de Roma o en entornos salesianos.
Al agradecer la oración por sus hijos, declarando que "hay pocos gestos de amor y amistad más hermosos" Iglesias y Montero se distancian de cierto ateísmo hipersensible que considera que la oración de intercesión es ofensiva. (Por ejemplo, en 2013, un ateo polaco llevó al Tribunal Supremo a un hospital reclamando 21.000 euros de compensación porque el hospital permitió a un sacerdote que le aplicara la unción de enfermos cuando él estaba en coma, causándole, dijo "gravísimo daño inmaterial"; lea aquí esta historia).
Gracias a los médicos y al sistema de salud pública
En su carta, los dos políticos, padres aliviados, dan las gracias a todas las personas que les han apoyado y atendido durante estos dos meses de preocupación por el estado de salud de sus hijos, Leo y Manuel, que nacieron prematuramente el pasado 3 de julio con apenas seis meses de gestación. Desde entonces han estado ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Gregorio Marañón de Madrid.
"Se trataba primero de salir adelante y después de ir superando etapas de recuperación. Cada día les mirábamos y les repetíamos lo mismo: vamos hijos, vamos", relatan.
"Antes de que pudieran alimentarse sólo de la leche de Irene, fue la leche de otras madres la que les ayudó a vivir. En cuanto fue suficiente, la de Irene fue también leche donada para otros niños. La sanidad pública hizo a nuestros hijos hermanos de leche de muchos niños y niñas como ellos. Todo ha sido posible gracias a un equipo de profesionales de la sanidad pública además del cariño y apoyo de nuestra gente. Muchos prematuros como ellos, en otros lugares del mundo, no tienen la misma suerte. Nuestros hijos tienen hoy dos meses porque nacieron en un país que cuenta con algo mucho más importante que cualquier himno o bandera: un sistema sanitario universal. Les contaremos que nada merece más lealtad que eso. Su vida y su salud no sólo son el resultado de los avances médicos y científicos, sino también de una sociedad que todavía asegura los mejores cuidados para cualquier persona independientemente de su posición social", insiste la carta.
Agradecen, dando nombres y apellidos, el trabajo de los médicos y sanitarios que les han acompañado en estos días. Valoran especialmente el trabajo de los enfermeros con los bebés prematuros. "Sólo las madres y padres de los niños que, como los nuestros, han pasado por una unidad de cuidados intensivos, saben lo que significan los mimos y caricias que reciben los prematuros. Con esas madres y con esos padres tendremos siempre un vínculo muy especial".
"Hemos estado con nuestros pequeños cada día, pero con nosotros estuvieron nuestras familias y nuestros amigos y compañeros que no han dejado de cuidarnos en ningún momento. Sin los abrazos de nuestra tribu todo habría sido mucho más difícil. No hemos dejado de recibir el cariño de muchos militantes de nuestro espacio político que han encontrado unos minutos para mandarnos ánimo, preguntar cómo nos iba y llenarnos de abrazos. Un proyecto político se construye sobre todo con grandes dosis de amor. A todos y a todas gracias. Tampoco olvidaremos que algunas de las palabras más hermosas, algunos de los abrazos más sinceros, algunos de los consejos más provechosos, vinieron de nuestros adversarios políticos. Somos republicanos pero recordaremos que un rey y una reina llamaron para preguntar por nuestros hijos y que todos nuestros rivales políticos preguntaron con frecuencia cómo estaban", añade el texto. Después de estos agradecimientos, es cuando mencionan la oración que han recibido.
Por su parte, el periódico El País, titula así la noticia: "Iglesias y Montero agradecen a la sanidad pública el cuidado de sus hijos prematuros". Al final de la noticia, mencionan las oraciones.