La adoración eucarística es una parte central de la vida cristiana que cambia al que la realiza y el entorno en el que se sitúa. Mientras en España la fe se desploma están empezando a crecer las capillas de adoración perpetua donde el Santísimo está expuesto las 24 horas. En los últimos siete años se han creado más de 30 en España y en este reportaje de Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo en Alfa y Omega se cuentan los beneficios de tener cerca una de estas capillas:

Las 45 capillas de adoración perpetua que hay en España son una semilla que no solo fortalece la fe de quienes se deciden a pasar una hora a la semana ante el Señor en la Eucaristía, sino que su fruto se extiende hasta los ancianos, los enfermos, los pobres…, además de renovar las estructuras parroquiales donde están implantadas.

Ejemplo de ello es la capilla de adoración perpetua de la parroquia de San Sebastián, en Badalona. Lleva abierta apenas año y medio, pero a día de hoy prácticamente todas las actividades de la parroquia se nutren de personas apuntadas a algún turno de adoración en la capilla, “gente que no solo va a Misa, sino que está comprometida con la parroquia”, dice Isabel Puig, coordinadora de los turnos.

Adoradores son los organizadores de La despensa de san José, una iniciativa que busca añadir a las donaciones que da Cáritas a las familias en necesidad productos que se escapan de lo habitual. La gente contribuye con una pequeña cantidad cada mes y gracias a un convenio con un supermercado se completa la cesta de la compra con alimentos y productos que no son solo arroz o bienes de primera necesidad.


También coordinada por adoradores y con una mayoría de participantes adoradores, encontramos el Apostolado san Alberto Hurtado, una iniciativa de acompañamiento a las personas sin hogar de Barcelona. “Tenemos varias rutas, les conocemos por su nombre y les seguimos su vida: ¿Cómo vas? Ánimo. Les damos compañía y hablamos con ellos, también para que se puedan desahogar”, explica Isabel. La iniciativa no se queda solo en el alimento y en la compañía. Como buenos adoradores, van más allá: “Rezamos por ellos y con ellos también, porque no somos una ONG, nosotros queremos evangelizar. No queremos dar solamente un bocadillo y un abrazo. Hay ocasiones en las que el párroco viene con nosotros y les propone confesarse, y se confiesan”. Además, esta iniciativa se ha organizado como una actividad familiar: “Esto lo hacen familias, con niños a partir de 10 años, a quienes ayuda mucho conocer esta realidad”.

En la parroquia funciona también un grupo de intercesión por enfermos de cuerpo y de alma que se llama María puerta del Cielo, cuyo objetivo es la formación, crecimiento espiritual, sanación y liberación interior a través de la oración. También está constituido por adoradores.


Esta es la capilla que se abrió en Badalona, la segunda existente en Cataluña

Las catequesis de adultos y de niños, el despacho, las actividades tradicionales de la parroquia las llevan adoradores. Y aparte, muchos de ellos hacen voluntariado por su cuenta, visitando ancianos y enfermos en residencias y hospitales, o acompañando en sus casas a fieles de la parroquia que por la edad o la enfermedad ya no pueden desplazarse.


La presencia del Señor ha transformado el barrio, y Él va haciendo su obra poco a poco”, cuenta Isabel. “Cuando pasas un rato delante del Señor, te manda a hacer cosas. Es una gozada. Te mueve a ser más consciente de las necesidades que hay en torno a ti, y te das cuenta de que no te puedes quedar sentado. Y también te da la fuerza para todo, para salir a hacer lo que tienes que hacer y estar en paz”, dice. Y matiza también que “muchas veces no hace falta salir a la calle. Lo primero es tu familia y es muy bonito ver que si vas al Señor Él te ordena las prioridades, te lleva a tu familia y hace que la cuides, te hace ser consciente de lo valioso de tu vida”.

Curiosamente, además, el efecto de la adoración no se queda en las personas que adoran, ni siquiera en la misma parroquia. “En Badalona no se hacía adoración antes de abrir aquí la capilla de adoración perpetua –confirma Isabel–. Pero ahora las parroquias de alrededor van exponiendo el Santísimo aunque sea un rato al día o a la semana. Tiene un efecto multiplicador”.


Las capillas de adoración perpetua son un fenómeno que no para de crecer por toda España. Si hace apenas siete años solo había 15, hoy son ya 45, muchas de ellas abiertas gracias al trabajo del padre misionero del Santísimo Sacramento Justo Lofeudo y de sus colaboradores.

Las últimas capillas inauguradas han sido la de San Fernando (Cádiz) y Consuegra (Toledo). El coordinador de los turnos de la primera, Francisco Vázquez, explica este crecimiento exponencial de la adoración: “Hay mucha necesidad de oración en toda España, porque España se está volviendo atea”. Y para ilustrar este interés por adorar cuenta que en apenas un mes se presentaron 500 personas voluntarias para realizar los turnos.

En Consuegra, la capilla se ha podido abrir gracias a la generosidad de una familia que compró para hacer viviendas un edificio que tenía anexa una capilla, pero quiso donar este espacio desinteresadamente para la adoración al Señor. La coordinadora de los turnos, Paulina Díaz-Tendero, señala que “Es una gozada venir aquí a rezar. Por aquí pasa mucha gente, incluso muchos que no están apuntados a ningún turno pero que quieren hacer su rato de oración”. Por eso, el que la capilla esté abierta 24 horas “no solo beneficia a los adoradores, sino que permite a todo el pueblo e incluso a gente de fuera acudir a rezar y estar un rato con el Señor”.