El cardenal Omella, presidente de la Conferencia Episcopal Española, y Javier Cremades, presidente de Cremades&Calvo Sotelo, han presentado este martes en rueda de prensa cómo será la auditoría independiente que han encargado los obispos españoles a esta firma sobre los abusos en el seno de la Iglesia en este país durante los últimos 60 años.

“En nombre de la Iglesia española, pedir perdón por el tema de los abusos, por todas las víctimas que tanto dolor han padecido y padecen”. Así comenzó su intervención el también arzobispo de Barcelona.

De este modo, con la auditoría encargada a uno de los bufetes más prestigiosos de España asegura buscar “dar un paso en nuestra obligación de transparencia social, de ayuda y reparación a las víctimas y la colaboración sobre los casos de abusos que afectan a la Iglesia”.

Omella agregó también en la rueda de prensa: “nos parece que tenemos que dar un paso más al frente en ese apoyo a las víctimas. Por eso, hemos encargado la auditoría para ver qué se puede mejorar”.

La duración de la investigación se estima en doce meses pero no se descarta que se alargue. Según el purpurado, “deberá tener toda la amplitud necesaria para clarificar los casos acontecidos en el pasado e incorporar los niveles de responsabilidad que impidan la repetición de los abusos”.

Insistiendo en los motivos, el presidente de la Conferencia Episcopal dijo que esta investigación quiere “ayudar a la reparación de las víctimas, estableciendo nuevos cauces de colaboración y denuncia, además de las que existen en las oficinas de las diócesis. Este trabajo de la Iglesia queremos que sea también auditado para que se haga mejor”.

Por último, el arzobispo consideró que se trata de “establecer un puente que facilite el trabajo de las autoridades más allá de los instrumentos que empleen. La CEE quiere asumir su responsabilidad ante sus víctimas, con un vehículo nuevo de comunicación que ayuden a esclarecer los hechos y evitar que ocurran en el futuro”.

Por su parte, Javier Cremades, abogado católico, ha confirmado que la auditoría se realizará en el plazo de un año y que 18 profesionales estarán encargados de realizarla. Para ello, trabajarán en coordinación con el Defensor del Pueblo.

“Vamos a ir hasta el final”, confirmó el presidente de la firma legal, que ha revelado que lo primero que hizo cuando le encargaron esta auditoría fue ponerse en contacto con el Defensor del Pueblo, el exministro socialista Ángel Gabilondo, persona propuesta por el PSOE y el Gobierno, en la parte socialista, para liderar la comisión de investigación sobre los abusos en el seno de la Iglesia.

“Esta investigación se hace también para colaborar con el Gobierno, lo primero que hice fue ponerme en contacto con Ángel Gabilondo. Sea cual sea el modelo que los poderes públicos establezcan, el trabajo que vamos a hacer va a estar en coordinación, esto no es una alternativa sino un complemento a los que ellos tienen que hacer, pero de una manera profesional, organizada, certificada de manera que nadie pueda tener dudas de que pueda ser una manipulación”, señaló Cremades.

Del mismo modo, informó que se investigarán todos los casos sin límite de tiempo hacia el pasado y que será “gratuita”, limitándose a repercutir los gastos.

El modelo de la auditoría será “un híbrido” basado en los informes realizados ya en Alemania y en Francia combinado además, tal y como recoge Europa Press, con el trabajo ya realizado por las oficinas de protección a menores puestas en marcha en todas las diócesis españolas.

Cualquier persona puede denunciar ahora a través del correo habilitado por el despacho denunciaabusos@cremadescalvosotelo.com. En esta línea, también accederán a todos los listados de afectados para contactar con ellos y se reunirán una a una con todas las asociaciones.