De este modo, el prelado habló de “una sociedad que a menudo tiende a banalizar la muerte, o no descubre la seriedad de la vida ante la muerte”. Por ello, pidió que el fallecimiento de la política del Partido Popular, y regidora valenciana durante 25 años, “se muestre fecunda como el grano de trigo que cae en tierra buena para dar mucho fruto”.
El arzobispo de Valencia se refirió a Rita Barberá como una “cristiana de una pieza, gran persona, gran alcaldesa, de corazón muy grande” y ha asegurado que “Valencia no sería la que es si no hubiera sido por ella”.
“La verdad de nuestra alcaldesa es su fe, confianza en Dios en quien siempre creyó y a quien siguió, su servicio, entrega, buscar el bien para todos, para su pueblo y amor indescriptible a la Mare de Déu dels Desamparats”, añadió.
Antonio Cañizares invitó a todos a “un urgente cambio y una regeneración en los modos de actuar en la sociedad española de la cultura contemporánea” y manifestó que “tenemos un gran reto que afrontar en la cultura contemporánea, que debe buscar el bien del hombre, de la persona, que ha de regir el comportamiento de todos, y en especial de los que ostentan y deben ser ejemplo para la sociedad, los cargos públicos”.
Así estaba la catedral de Valencia este miércoles durante la misa por Rita Barberá
Además, el arzobispo valenciano anunció que el próximo lunes la Catedral a las 19.30 horas acogerá el funeral que “oficialmente ofrece la diócesis de Valencia a la que ella tan unida se sintió y tanto quiso, y que quiere hacer por esta hija tan querida, la diócesis valencia”.
Al término de la eucaristía Asunción Barberá, hermana de la ex alcaldesa, ha agradecido a “todos y cada uno de los que estáis aquí rezando por ella, valencianos, a los que ella se entregó y os pide que sigáis orando con ella porque el único juicio verdadero que nos interesa es el del Todopoderoso”, momento en que los asistentes han prorrumpido en un fuerte aplauso de varios minutos de duración.