El 22 de junio se celebra la fiesta de Santo Tomás Moro, patrón de los políticos, mártir en 1535 por seguir su conciencia cristiana, fiel a Cristo y a Roma pese a las amenazas de su rey, Enrique VIII de Inglaterra.
En Barcelona, el arzobispo Juan José Omella celebró al mártir con una misa con políticos el 21 por motivos de agenda. (La homilía completa, aquí en catalán).
A partir del ejemplo del santo mártir, exhortó: "Pidamos a este gran santo que interceda por todos nosotros, hombres y mujeres que tenemos responsabilidad pública, para que vivamos más en coherencia con lo que somos y lo que configura nuestras vida; pero hay que vivirlo con gran respeto a los demás. Que lo que nos dicte la conciencia -nuestro pepito grillo- prevalezca sobre los intereses de partido, incluso sobre los intereses personales".
La misa se celebró en la parroquia de San Ramón de Penyafort. Acudieron miembros de la Associació Persona i Democràcia (www.personaidemocracia.cat), que ofrece reflexión y debate político con un enfoque basado en el humanismo cristiano y la filosofía personalista. Entre los asistentes, estaba Germà Gordó, exconseller de Justicia y diputado de Junts Pel Sí.
El arzobispo de Barcelona pidió a los políticos luchar contra la violencia que daña a los más débiles e indefensos. "No nos tapemos los oídos, ni cerremos los ojos o miremos hacia otra dirección. Que el Señor nos regale la fuerza para luchar contra la tentación de la omisión", añadió.
El arzobispo lamentó además que los políticos no hablen públicamente de Dios en sus alocuciones públicas y recordó que en otros países occidentales los cargos públicos acostumbran a empezar sus intervenciones invocando a Dios y encomendándose a él.
Pidió también defender la justicia, la paz y la fraternidad y recurriendo también al humor y la alegría. "Los cristianos no podemos perder este don precioso de la alegría de la confianza en Dios - dijo Omella- que es Padre y que cuida de nosotros. Pidámosle que nos conceda este don de la alegría".
El prelado pidió a los políticos que tuvieran "sentido común y altura de miras" y afirmó sentir "dolor" por la falta de respeto por los Derechos Humanos y por el maltrato de inocentes e indefensos. "Todo lo que sea olvidarse de los pobres y pequeños, todo lo que no sea establecer puentes de diálogo y comunión entre todos, todo lo que sea faltar al respeto a personas e instituciones, es no seguir el ejemplo de nuestro patrón", agregó Omella.
En el vídeo bajo estas líneas, la ejecución de Santo Tomás Moro, patrón de los políticos, según la serie "Los Tudor"