Los jugadores y directivos del Athletic Club de Bilbao llevaron a la Virgen de Begoña, patrona de la ciudad, la Supercopa ganada jugando contra el F.C.Barcelona en el Nou Camp el pasado lunes.
La basílica mariana bilbaína se quedó pequeña este martes 18 de agosto ante la multitud de fieles y seguidores del equipo que acudieron a acompañar a jugadores, técnicos y junta directiva, encabezada por Josu Urrutia, que ofrecieron la copa a la Virgen, popularmente conocida como la ´Amatxu´ (apelativo carñoso en vasco para "madre").
El párroco de Begoña, José Luis Atxotegi, agradeció a Dios, a la Virgen y a los jugadores la alegría que han traído a tantos aficionados y bilbaínos.
El técnico Ernesto Valverde, y el capitán, Carlos Gurpegui, ofrecieron formalmente el trofeo a la Virgen.
Las campanas de la basílica repicaban mientras tanto el himno del Athletic, que cantaron los hinchas que llenaban los bancos y los pasillos de la iglesia.
Después los jugadores se fueron en un autobús descubierto decorado con el lema ´Txapeldunak 2015´ (Campeones 2015) hacia el ayuntamiento a proseguir los festejos.