La procesión de Ramos en Elche es vista por muchos como el pistoletazo de salida visual que marca el inicio de la Semana Santa española, con la imagen de Jesús Triunfante acompañada por 60.000 personas con enormes y elaboradas palmas fabricadas a partir del palmeral de la ciudad, el más grande de Europa.

Pero este año el coronavirus impide celebrar la procesión de las palmas blancas, que es Fiesta de Interés Turístico Internacional y mueve unos 20 millones de euros cada año. Procesiones de Domingo de Ramos en Elche están documentadas desde 1371, según se conserva en el Archivo Municipal de la ciudad, mientras que la primera referencia al comercio de la palma blanca está fechada en 1429. Esta tradición se bloquea este año por motivos de salud pública.

Así fue el Domingo de Ramos en Elche en el año 2019

Con el confinamiento se intentó distribuir las palmas mediante comercio online, pero las autoridades establecieron luego que no era un bien de absoluta necesidad y bloquearon su distribución.

Pero Elche quiere celebrar este día grande. El alcalde de Elche, el socialista Carlos González, ha animado a los ilicitanos a que este Domingo de Ramos salgan a las 12 horas a sus balcones vestidos con las mejores galas, traten de crear sus propias palmas y todos a una voz entonen el himno 'Aromas Ilicitanos', un himno mariano que se escucha en cada acontecimiento importante y alude a otros símbolos locales como la Dama de Elche y el palmeral. También se anima a los ciudadanos a dejar colgadas las ramas en los balcones.

Además del Domingo de Ramos, destacan en la Semana Santa ilicitana la procesión de las Aleluyas -papeles de colores con alegorías religiosas que se lanzan desde balcones-, el Domingo de Resurrección o la ceremonia de la Trencà del Guió el Viernes Santo. 

AROMAS ILICITANOS (versión breve)

Escucha ahora patria mía
el canto hermoso y sin igual
de este pueblo que al cielo mira
con alegría la gracia eternal

Tiene su alma altruista
tiene su Dama universal
tiene su Virgen por patrona
morena, morena, la que vino por el mar

Bajo el frondoso ramaje
del milenario Palmeral
tiene por reina y señora
nuestra Palmera Imperial

Con los ecos del Misteri
y la gran Nit de l'Albà
llevamos en nuestro pecho
para la Virgen un altar