Jordi Bertomeu, el sacerdote de Tortosa que desde principios de 2018 ha sido el principal investigador vaticano de los casos de abusos sexuales en Chile, participará en unas jornadas en Cataluña para tratar la prevención de abusos sexuales en entornos eclesiales, organizadas por la Unión de Religiosos de Cataluña (www.urc.cat), que coordina a las 165 congregaciones presentes en la región, es decir, a unos 6.000 religiosos y religiosas.

Bertomeu, oficial de la Congregación para la Doctrina de la Fe y también miembro de la diócesis tortosina, ha impartido cursos sobre prevención ya en varios países hispanos ante obispos y responsables. Por doquier, Bertomeu repite a los obispos que “la Iglesia debe ser un lugar seguro, comprometida en estar vigilante y en hacer justicia” y que “no podemos tolerar que se tape o esconda para que la Iglesia no quede mal. La Iglesia ya está mal cuando hay un delito de este tipo”.

La Unió de Religiosos de Catalunya (URC), que agrupa a las 165 congregaciones presentes en esta comunidad, ha convocado para el próximo día 19 de febrero una nueva jornada sobre prevención de abusos a menores y protección de la infancia.

Según ha informado la URC, la jornada será una sesión de trabajo con los máximos responsables de las congregaciones que da continuidad al trabajo de jornadas anteriores.A esa jornada, las congregaciones han invitado a responsables de los obispados catalanes y a testigos de víctimas de abusos, y participarán la ex jefa de Psicología del Hospital Sant Joan de Déu y fundadora de la Unidad Funcional de atención a los Abusos sexuales a Menores (UFAM), Dolors Petitbó, y el abogado y licenciado en Ciencias de la Educación y en Filosofía Francesc Alonso.

Según fuentes de la URC, aunque el anuncio de la jornada se ha hecho coincidiendo con la denuncia de nuevos casos de abusos perpetrados presuntamente por un monje de Montserrat hace 40 años (la prensa habla de 3 víctimas de ese monje repartidas en 20 años de actividad) el encuentro estaba convocado y planificado ya desde noviembre, coincidiendo con la convocatoria extraordinaria del papa Francisco a todos los presidentes de las conferencias episcopales del mundo que se celebrará del 21 al 24 de febrero en Roma.