La ex abadesa de Belorado, Sor Isabel de la Trinidad (Laura García de Viedma), al frente de un convento donde hay actualmente 13 religiosas (8 excomulgadas y 5 no excomulgadas por ignorarse su posición ante la deriva de la comunidad), ha concedido una entrevista a RTVE por medio del jefe de prensa recientemente contratado, Francisco Canals.
Reserva sobre sus intenciones
La ex clarisa afirma que la evolución de la comunidad se realizó "en el curso de los años" y algo conversaron con el vicario de religiosas de la archidiócesis de Burgos, pero su confianza en el arzobispo Mario Iceta estaba "muy debilitada". Según dice, había personas que se acercaban "al torno y a la reja para obtener información que trasmitían al arzobispado directa o indirectamente", lo cual "era muy desagradable y delicado". Afirma que "ha rehuido" encontrarse con ellas de forma directa.
Tampoco dijeron nada a sus capellanes porque "era un tema interno", y si bien el trato con ellos era "afectuoso" y no tienen a nivel personal "nada que objetar", tenían claro "que ellos informaban de todo lo que sabían y veían al arzobispo".
En cuanto a los fieles que acudían al convento, transmitirles lo que pensaban "hubiera sido por nuestra parte una imprudencia lamentable, y una fuente de turbación y desasosiego en su vida de fe. Ni se nos ocurre tal cosa".
La herejía modernista
Resume afirmando que la historia de sus desavenencias con la Iglesia es "larga y dolorosa": "Hemos abandonado el modernismo, herejía que invade los estamentos eclesiales que provienen de Roma", dice. Y considera que tanto las religiosas excomulgadas como las que no están bien atendidas espiritualmente por el obispo y los sacerdotes sedevacantistas que las apoyan, a los que considera "católicos".
En cuanto a su situación económica, cuentan con "corazones generosos" que les dan limosnas y les traen víveres: "Ahora, de cara a la Navidad, nos gustaría hacer algo de chocolate, ya que nos llaman los clientes preguntando si vamos a fabricar. Dios dirá si eso llega a efecto". Y tienen un único empleado de mantenimiento que lleva trece años con ellas.