Este sábado se celebra en las calles de Valdebebas (Madrid) la ceremonia de beatificación del ingeniero, sacerdote, obispo y primer sucesor del Fundador del Opus Dei, Álvaro del Portillo.

Fue uno de los protagonistas del Concilio Vaticano II, como impulsor del papel de los laicos en la Iglesia y de la identidad del sacerdote en la sociedad actual.

Se espera la participación de decenas de miles de fieles laicos procedentes de 80 países de los cinco continentes y unos 1.200 de sacerdotes que impartirán los sacramentos del perdón y de la comunión.

Concelebrarán más de 150 obispos de todo el mundo –desde el Arzobispo de la gran metrópoli de Hong Kong hasta el ordinario de la pequeña diócesis nigeriana de Oyo, o el obispo maronita de Beirut (Líbano)– y 17 cardenales presididos por el delegado del Papa, el Prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos, cardenal Amato. Entre ellos, estarán los cardenales Pell y Müller del Vaticano o el cardenal de Kinshasa (R.D.Congo). Acudirán también religiosos y miembros de diversos movimientos eclesiales.


Se han contabilizado más de 3.000 asistentes de México, 1.700 de Filipinas, 640 de Kenia, 600 de Australia, 350 del Congo, 280 de Costa de Marfil, 68 de la India, etc. También habrá representaciones de Emiratos Árabes, Taiwán, Indonesia o Nueva Zelanda.

La ceremonia se celebrará a las 12 horas, para que muchos asistentes de España puedan ir y volver en el día.

Muchos de ellos acudirán a Valdebebas en los 1.600 autobuses que se han inscrito. 

Además, se ha facilitado un servicio de buses lanzadera desde las bocas de Metro y estaciones de cercanías más cercanas.


La Prelatura del Opus Dei señala que son cientos de miles las personas concretas que se benefician del trabajo de las distintas entidades que el futuro beato animó a poner en marcha en los cinco continentes:

-hospitales en África,
-capacitación de la mujer indígena en Latinoamérica,
-formación profesional para adultos en Filipinas,
-bancos de alimentos en Europa,
-integración de inmigrantes en EEUU, etc.


La ceremonia estará presidida por el delegado del Papa Francisco, el cardenal Angelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos. Junto a él concelebrarán el cardenal Antonio María Rouco, arzobispo emérito de Madrid y Mons. Javier Echevarría, obispo prelado del Opus Dei.

Participa también la familia de José Ignacio Ureta, niño curado milagrosamente por intercesión del nuevo beato. Ellos serán los encargados de portar las reliquias al altar.

Como es habitual en estas ceremonias, asistirán representantes de la administración estatal, autonómica y local. Además, estarán presentes algunas autoridades civiles internacionales, en reconocimiento del beneficio para sus sociedades que ha supuesto el mensaje difundido por el próximo beato, como la Primera Dama de Guatemala, Rosa de Pérez, el vicepresidente de Honduras, Ricardo Álvarez o el Ministro de Educación de la R. D. del Congo, Maker Mwangu.

El coro principal de la ceremonia de la beatificación y de la santa misa de acción de gracias será el coro creado con ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud 2011, que cuenta con 150 voces, y que se ha ampliado hasta llegar hasta las 250.

Se espera la participación de unos 40.000 jóvenes de todo el mundo, de los que 3.500 colaborarán como voluntarios para atender a los participantes en la celebración.


La ceremonia comenzará con una procesión de entrada a las 11:50 y está previsto que termine a las 14 horas. El momento culminante de la celebración será la lectura de la declaración de beatificación por parte del delegado del Papa Francisco, el cardenal Amato y consiguiente descubrimiento de la imagen del nuevo beato.

La superficie habilitada para los asistentes es de 195.000 m2 de calles urbanizadas pero sin edificios construidos.

Todos los elementos que tienen que ver con la ceremonia son sencillos, sobrios y reutilizables. El altar, el ambón y la sede se han aprovechado de otras ceremonias de la Iglesia en España (beatificación de los mártires de Tarragona o la JMJ de Madrid). Y lo que ha sido necesario fabricar, como la plataforma del altar, está compuesta de estructuras tubulares y tras la ceremonia se desmontará para volver a utilizarse.

El altar estará adornado con una serigrafía del nuevo beato (de 4 x 6 metros), que se descubrirá tras la lectura de la fórmula de beatificación. Y una serigrafía de la Virgen de la Almudena (de 5 x 6 metros), patrona de Madrid, ante la cual Álvaro del Portillo rezó durante sus años en Madrid.

Unas 600 personas de todo el mundo han colaborado confeccionando lienzos y ornamentos sagrados, entre ellas, varios conventos de clausura. Una vez utilizados se llevarán a iglesias jóvenes o en países con especiales dificultades (como Uganda, Irak, Filipinas –donde tras los tifones muchas iglesias han sido derruidas– o Jerusalén).

La Asociación La Veguilla, que emplea a más de cien personas con discapacidad intelectual en sus invernaderos, ha regalado las 10.000 flores que adornan las inmediaciones del altar. El resto han sido regaladas por una donante guatemalteca.


Para cubrir la celebración se han acreditado más de 200 periodistas de 88 medios de comunicación de 18 países.

Para todas las personas que no podrán estar físicamente en la beatificación, la ceremonia se transmitirá por streaming a través de YouTube: www.youtube.com/opusdei.

Además la ceremonia será emitida en directo por más de 25 televisiones, entre las que está el Centro Televisivo Vaticano y la EWTN, que a su vez compartirán su señal con otras televisiones. En España se podrá ver en directo en 13TV, Telemadrid y TV Castilla-León.