Los Reyes Magos existen. Y si no, que se lo digan a Silvia y sus hijos, amantes de la repostería, después de haber visto su carta respondida al recibir unos moldes y utensilios de cocina para poner en práctica su afición. O a Vilmer, cuando desenvolvió una tienda de campaña para sus acampadas en el bosque. O a Grzegor, que, viviendo sin hogar en Barcelona, pidió en su carta unas zapatillas para ir a su trabajo… y le trajeron una bici. Existen… y a veces se cambian el apellido por el de "Majos".
La de los Reyes Majos es una iniciativa que surge hace 14 años de una persona, Blanca Piera Miquel, la fundación que dirige, Miaportación, y un deseo: el de cumplir otros deseos. Todo empezó siendo una forma de caridad y altruismo dirigida a particulares, pero en la que cada vez participaban más empresas.
Si bien las empresas pueden inscribirse desde hace tiempo, las inscripciones acaban de abrirse para particulares este 17 de noviembre.
Hoy, casi quince años después, miles de "Reyes Majos" voluntarios han cumplido más de 13.000 deseos de personas adultas y familias en situaciones desfavorables por Navidad. Silvia y sus hijos, Vilmer o Grzegor son solo la punta del iceberg de una iniciativa que en las Navidades de este año pretende superar sus objetivos y conseguir 2.500 Reyes Majos que respondan a otras tantas cartas de Navidad.
En este proyecto, personas sin hogar, personas mayores en residencias, personas con discapacidad intelectual, migrantes o familias escriben su carta a los Reyes y gracias a la magia de los Reyes Majos, ven cumplidos sus deseos.
Blanca Piera Miquel, directora de la Fundación Miaportación, explica que como parte del proceso, “los Reyes Majos no conocen personalmente a la persona que les escribe la carta, pero a través de los deseos que se les pide y la respuesta de sus regalos, viven la experiencia de ayudar a personas en situación desfavorable”.
El proyecto Reyes Majos se realiza con la colaboración de entidades sociales de España, que proporcionan las cartas a los Reyes, escritas por los usuarios a los que atienden.
Este año se cuenta con la participación de 50 entidades sociales de Barcelona, Madrid, Valencia, Gijón y Murcia. Todas ellas son entidades colaboradoras de la Fundación Miaportación y de su plataforma Miaportacion.org, una web de microdonaciones donde, gracias a la ayuda de particulares y empresas, diariamente ayudan a las entidades locales a cubrir sus pequeñas necesidades.
El proceso consta de 3 sencillos pasos: las personas adultas en situación desfavorable escriben su carta a los Reyes Majos pidiendo un regalo, que le llega cada año en el mes de noviembre a un Rey Majo que se ha inscrito previamente en esta plataforma. El Rey Majo compra o consigue el regalo pedido, responde mediante una nota y se envía a la entidad social en cuestión para hacer realidad el deseo pedido por esa persona.
Es, además, una cadena mágica en la que los Reyes Majos no conocen personalmente a la persona que les escribe la carta, pero a través de los deseos que se les pide y la respuesta de sus regalos, viven la experiencia de ayudar a personas en situación desfavorable.
El plazo de inscripción ya está abierto para las empresas y para los particulares.
Integrantes de la fundación Miaportación han estado presentes en numerosas entregas de los regalos, donde han podido experimentar de cerca el impacto de los Reyes Majos. También Piera lo ha vivido en primera persona, que contempla como algo "conmovedor" ver que alguien a quien los beneficiarios no conocen cumple sus deseos y les desea una Feliz Navidad con palabras de ánimo y esperanza.
A menudo, afirma, "estas palabras emocionan más que el regalo en sí, actúan como un abrazo cálido y alegran el alma.”
Puedes inscribirte como "Rey Majo" en este enlace o escribiendo al correo empresamaja@miaportacion.org.
"Independientemente del tipo de carta que reciben, los Reyes Majos se ponen en la piel de la persona que les pide un deseo y empatizan con su situación. Es una oportunidad para conocer fragmentos de la vida de personas en situaciones sociales vulnerables y delicadas. Gracias a este proyecto, esta realidad se hace más cercana y nos brinda la oportunidad de implicarnos", explica.
Blanca Piera Miquel (derecha), directora de la Fundación Miaportación.
Cumplir los deseos de miles de personas sin ningún coste
La participación de empresas en Reyes Majos conlleva una aportación económica definida, desgravable a nivel fiscal, que varía en función del tamaño de la empresa. Esta aportación permite a la Fundación continuar con su misión de atender las necesidades de las entidades sociales con las que colabora y en especial con este proyecto social de Navidad.
La recogida y entrega de los regalos no tiene ningún coste para la empresa. El proyecto cuenta con la colaboración de otras empresas de logística que ofrecen sus servicios.
El hecho de que las empresas acojan este proyecto para vivir una Navidad solidaria en el trabajo es muy significativo.
Entre otras, cuenta además con la colaboración de The Mail Company que se hace cargo del envío de los regalos de los Reyes Majos que participan desde su empresa. Y con Glovo que también vuelve a participar este año facilitando envíos gratuitos de regalos a los Reyes Majos particulares.
Para Blanca Piera, “es un claro ejemplo de cómo una empresa puede buscar acciones concretas para que sus valores y compromisos sociales se vivan desde dentro y ser así coherente con su responsabilidad social”.
“Proyectos como Reyes Majos construyen marcas amables, sociales y atractivas, y empresas donde el ambiente de trabajo es agradable; además de generar un impacto positivo en empleados, clientes, en la comunidad y en la sociedad”, explica.
Finalmente, Piera destaca que "el cometido de la Fundación Miaportación es facilitar que las personas y empresas con inquietud social puedan implicarse en acciones concretas para ayudar a los más vulnerables y en eso trabajamos todo el año y de forma especial en Navidad”, cuando ofrecen la oportunidad para vivir de manera solidaria estas fechas y poder cumplir todos los deseos que se piden a los Reyes Majos.