La Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), aprobada por el Gobierno del PP a finales de 2013, abría una puerta a las comunidades autónomas para que modificaran el horario de la clase re Religión o su alternativa Valores Sociales y Cívicos (es obligatorio cursar una de las dos).
A diferencia de lo que ocurría con la anterior ley educativa, la LOE, con la nueva normativa aprobada por el PP las comunidades pueden tocar los horarios.
Y la primera Administración en utilizar esa puerta abierta ha sido el Ministerio de Eduación allí donde aún conserva las competencias: en Ceuta y Melilla.
El departamento de José Ignacio Wert decidió bajar a la mitad el horario mínimo semanal en las dos ciudades autónomas, que pasa de los 90 a los 45 minutos (como explicamos aquí en ReL).
Este paso disgustó a los obispos del sur de España, que se quejaron a través de un comunicado conjunto y avisaron del mal ejemplo que suponía para el resto del país.
Efectivamente, así ha sido, y Asturias, Canarias y Galicia (regiones que suman más de 6 millones de habitantes) han anunciado que recortarán el tiempo dedicado a Religión.
Asturias, gobernada por los socialistas, reduce un tercio el horario y lo deja en 60 minutos a la semana, según detalla su consejera de Educación, Ana González. “El tiempo que se gana servirá para dar más Inglés y para mantener Ciudadanía”, apunta la consejera, del PSOE.
Canarias, gobernada por una alianza de Coalición Canaria con los socialistas, deja la clase de Religión “en una sola sesión a la semana”, detalla Manuela Armas, viceconsejera de Educación de esta comunidad, también del PSOE.
Galicia, gobernada por el PP, reducirá un 22% el horario en toda la etapa de primaria. Fuentes del departamento gallego de Educación sostienen que el tiempo que se ganará se empleará en reforzar las Matemáticas, aunque aseguran que se deja la opción a que los centros puedan incrementar algo el horario de Religión si quieren.
Probablemente más comunidades autónomas se sumen a esta campaña de minimización de la clase de Religión, con Andalucía como una de las candidatas más seguras.
Los obispos del Sur de España (las 13 diócesis de Andalucía, Murcia e Islas Canarias) ya protestaron ante las medidas de Wert para Ceuta y Melilla. Quizá los de Galicia y Asturias debieran hacerlo también. Este es el comunicado de los del sur de España.
»Ante la publicación por parte del Ministerio de Educación de la Orden que reduce a la mitad las horas lectivas de religión en las ciudades de Ceuta y Melilla, la Asamblea de Obispos del Sur de España, reunida en Córdoba en sesión ordinaria, expresa su disgusto por el tratamiento que el Gobierno de España ha concedido a la asignatura de religión en la LOMCE.
»Considera que la asignatura de religión no ocupa el lugar que legal y culturalmente le corresponde en el sistema educativo español. No obstante, estima positivamente algunas medidas, como la regulación de una alternativa real a la asignatura y la correcta valoración y evaluación de la misma en el sistema educativo.
»Especialmente preocupante resulta la inadecuada regulación de la religión en los niveles de Educación Infantil y Bachillerato, que pueden quedar sin dicha enseñanza religiosa.
»Además, el hecho de que la regulación de esta asignatura quede como competencia de las comunidades autónomas, implica, de facto, la posibilidad de normativas diversas en cada autonomía. Esto podría dar lugar a situaciones dispares en cada territorio, hasta el punto dehacer de la enseñanza de religión algo puramente testimonial, afectando, así, al derecho de las familias que la eligen y al profesorado que la imparte.
»Los Obispos esperan del gobierno de la Junta de Andalucía el mantenimiento de la actual situación de la asignatura de religión en nuestra comunidad autónoma, respetando así el cumplimiento de los acuerdos internacionales, el respeto de la tradición religiosa en nuestro pueblo y el derecho de los padres que, en su inmensa mayoría, eligen cada año esta asignatura para la educación de sus hijos.
»Igualmente invitan a profesores, padres y al pueblo cristiano en general a que apoyen y defiendan, en el marco del estado social y democrático de derecho, la impartición de la asignatura de religión en nuestro sistema educativo.
Córdoba, 21 de mayo de 2014