El arzobispo de Burgos, Francisco Gil Hellín, ha expresado este sábado su "afecto y cercanía" al párroco, a los feligreses de la parroquia y vecinos de Tordómar, pueblo castellano con unos 300 habitantes, ante el fallecimiento de seis personas en la casa rural de la localidad la noche anterior.

En concreto, el arzobispo se encuentra en Roma para participar desde el próximo lunes en la visita ´Ad Limina´. Desde allí ha enviado un comunicado al párroco de la localidad, Fernando Susaeta Montoya, para que la lea en la misa parroquial del domingo.

En la carta Gil Hellín se lamenta por lo ocurrido, expresa su "afecto y cercanía" a los supervivientes y los familiares de los fallecidos y agradece a los vecinos la ayuda prestada en auxiliar a las víctimas.

Asimismo y según ha informado el obispado a Europa Press, Gil Hellín invita a todos los fieles de la Diócesis a elevar plegarias al cielo por el eterno descanso de los fallecidos "y para que a todos los familiares no les falte el consuelo de Dios y su fortaleza".


Seis muertos, entre ellos tres niños con edades comprendidas entre los cuatro y los seis años, y cinco heridos, entre ellos dos menores de siete meses y cinco años, es el balance del incendio registrado en la casa rural Ribera del Arlanza en la localidad burgalesa de Tordómar. 

Murieron 3 mujeres, de 59, 36 y 35 años, y 3 niños de entre 4 y 6 años. 

Los seis cadáveres fueron trasladados a la capital burgalesa por la funeraria San José en torno a las 06.00 de la madrugada del sábado, 22 de febrero.

Los heridos han sido una mujer de 34 años y dos varones, de 34 y 37 años, además de una niña de cinco años y un pequeño de siete meses.

Uno de los adultos heridos en el siniestro en la casa rural de Tordómar (Burgos) y los dos menores también ingresados han recibido el alta médica, según el parte médico facilitado por la Consejería de Sanidad.



La casa siniestrada en el pueblo de Tordómar

Por su parte y según este informe, otros dos adultos permanecerán ingresados para control de las quemaduras que presentan. Además un sexto paciente adulto que continúa bajo vigilancia psicológica.

Los seis fallecidos y los cinco heridos pertenecían a una familia que se había reunido en la casa rural en un encuentro organizado por la abuela.

Los afectados procedían de Madrid y de Gijón (Asturias).

Tanto Gijón como Tordomar han declarado 3 días de luto oficial.

También fueron atendidos en el Hospital cinco vecinos del pueblo de Tordómar que presentaron un cuadro leve por inhalación de humo, si bien fueron dados de alta de forma inmediata.

En torno a las 2.32 de la madrugada, el Servicio de Emergencias Castilla y León 112 ha recibido "varias llamadas" que alertaban sobre un incendio en la casa rural Ribera del Arlanza, ubicada en el número 21 de la avenida del Generalísimo de Tordómar, en la que había "varias personas atrapadas", incluidos varios niños. Las causas del incendio aún no han sido esclarecidas.

El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha acudido al Hospital para interesarse en persona del estado de salud de los heridos y ha estado acompañado por el delegado del Gobierno en Castilla y León, Ramiro Ruiz Medrano; el subdelegado del Gobierno en Burgos, José María Arribas, y el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Burgos, Baudilio Fernández-Mardomingo.

El delegado del Gobierno en Castilla y León ha hecho un llamamiento para evitar especulaciones sobre lo ocurrido en esta casa rural y, a la espera de la confirmación oficial tras la investigación de los hechos, ha explicado que todo apunta a que el fuego se originó en un elemento mobiliario del salón del que emanó el gas tóxico que intoxicó mortalmente a seis víctimas.

El delegado del Gobierno ha expresado su pesar por el "drama" y la "tragedia" que han vivido la localidad de Tordómar, la provincia de Burgos y la comunidad autónoma de Castilla y León en general y ha aprovechado la ocasión para destacar el trabajo de los agentes de la Guardia Civil y de los servicios sanitarios y para hacer una especial mención a la colaboración ciudadana que, según sus palabras, fue fundamental para evitar una tragedia aún mayor.