La catedral de Sevilla (España) acogió este sábado 18 de noviembre la beatificación de 20 cristianos mártires -diez sacerdotes, un seminarista y nueve seglares- que dieron su vida por Cristo en el pasado siglo en España, en el año 1936.
La Eucaristía estuvo presidida por el Prefecto del Dicasterio de la Causa de los Santos, el cardenal Marcello Semeraro, y participó en ella también el nuncio en España, Bernardito Auza, y numerosos obispos, sacerdotes de la diócesis sevillana y del resto de España, así como fieles llegados de muchos lugares.
No dejarse intimidar
"El cristiano no debe dejarse intimidar, sino mantener la confianza en Dios. La esperanza no defrauda porque el amor de Dios ha sido derramado por el Espíritu Santo", comentó el cardenal que señaló que la veneración de los mártires, "incluso en la persecución, no debe apartamos de nuestra condición cristiana".
Durante la misa se ha realizado la procesión con las reliquias e incensación de las mismas para después ser colocadas en una esquina del altar. También se han descubierto tapices con la imagen de los nuevos beatos justo encima del Altar del Jubileo, se ha cantado el 'Gloria y honor a ti' de Lucien Deiss.
El pasado 22 de junio, el Papa Francisco aprobó el decreto que reconocía el martirio de 20 católicos de Sevilla (España) asesinados por milicianos en el marco de la persecución religiosa que tuvo lugar durante la Guerra Civil española.
El sacerdote y párroco Manuel González-Serna Rodríguez encabeza el listado total de 10 sacerdotes y 9 laicos y 1 seminarista martirizados.
Entre ellos, además de sacerdotes, había una sacristana de 68 años, un abogado, un farmacéutico, un carpintero y varios miembros de consejos parroquiales. Aunque asesinados en la diócesis de Sevilla, los había de Huelva, Cádiz y Granada. El más joven, Enrique Palacios Monrabá, tenía 19 años. Fue fusilado junto a su padre, Manuel Palacios Rodríguez.
Entre los rasgos comunes, todos carecieron de un juicio justo y en su mayoría fueron encarcelados antes de su "muerte violenta" por "odio a la fe" en la archidiócesis de Sevilla. Muchos de ellos "oraron, se animaron, confesaron y expresaron palabras de perdón para los verdugos". La mayoría pertenecían a la Adoración Nocturna, Acción Católica o se significaron intentando impedir que se cometieran actos violentos en templos o mientras se celebraba la Santa Misa, como es el caso del sevillano Manuel Luque Ramos.
El martirio del siervo de Dios Manuel González-Serna Rodríguez y 19 compañeros mártires se aprobó en la sesión ordinaria de cardenales y obispos del Dicasterio para las Causa de los Santos del pasado 22 de junio de 2023.
Puedes ver aquí completa la beatificación de los 20 mártires de la Iglesia.
El 3 de octubre de 2014, tuvo lugar la solemne apertura de la causa de beatificación y canonización de estos mártires de la Archidiócesis de Sevilla, en una ceremonia celebrada en la Capilla Real de la Seo hispalense presidida por monseñor Juan José Asenjo, entonces arzobispo titular de la Archidiócesis.