El obispo emérito de Albacete, Ireneo García Alonso, falleció este lunes a los 89 años en su casa de Toledo.
Su cuerpo fue velado en la Residencia de las Hermanitas de los ancianos desamparados de Toledo, hasta su traslado este martes a la catedral de Albacete, donde el actual obispo, Ciriaco Benavente Mateos, celebrará la misa exequial a las seis de la tarde. Su cuerpo será enterrado en la cripta de la Capilla de la Virgen de los Llanos.
Monseñor García Alonso nació el 25 de marzo de 1923 en Quintanilla Vivar (Burgos) y realizó sus estudios eclesiásticos en el Seminario de su ciudad entre 1934 y 1940 y en Toledo, entre 1941 y 1942. Se doctoró en Teología por la Universidad Pontificia de Salamanca en 1948 y en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma.
La presidenta de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, recordó al obispo fallecido con un recuerdo personal: "Fue el obispo de mi ciudad, a quien pude conocer en mis años de juventud y contrastar su férrea espiritualidad y su enorme compromiso y dedicación hacia los demás", dijo.