Los jugadores, el cuerpo técnico y la directiva del Real Madrid han cerrado con una ofrenda floral a la Virgen de la Almudena una jornada de celebraciones por la consecución del título de Liga, que se inició esta mañana con las visitas a la Comunidad y al Ayuntamiento de Madrid.
Los campeones han cerrado así un día de marcado componente institucional que ha culminado en la catedral de la Almudena, donde la patrona de la ciudad ha recibido un ramo de flores y la Copa que acredita a los madridistas como ganadores de la Liga.
Con el sonido de las campanas de fondo, y acompañados de una multitud de aficionados congregados en las cercanías del templo, la expedición ha entrado puntual en el templo, donde ha sido recibida por el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela.
Dentro se ha oficiado una ceremonia corta, donde el presidente Florentino Pérez ha sido el primero en tomar la palabra para dar sobriedad al acto más serio de toda la jornada: "El Madrid cumple una vez más esta tradición. Es un título que traemos a la catedral. El esfuerzo ha sido enorme, pero lo hemos logrado con récord de puntos y goles. Hemos tenido fe y nunca nos hemos rendido", ha destacado.
"Vivimos momentos de dificultad con la crisis. El fútbol es un instrumento para celebrar e impulsar la solidaridad. Estamos convencidos de que devolvemos a la sociedad lo que nos da. Trabajamos para compartir nuestros éxitos. Por eso, ofrecemos este título a la Almudena", ha añadido.
Después, ha tomado la palabra Rouco Varela para agradecer la visita del Real Madrid: "Es un goce ofrecer el título a la patrona. El fútbol es un deporte que pertenece al ser del hombre, que necesita cultura, crear belleza y que necesita jugar. Un fútbol de valentía, de esfuerzos. El Madrid da un paso importante al ofrecerle la Copa a la Virgen. Es un augurio de éxitos", ha afirmado.
Acto seguido, toda la plantilla ha acompañado a los capitanes Sergio Ramos, Iker Casillas, Marcelo Vieira y Gonzalo Higuaín al altar desde donde la Virgen de la Almudena, en lo alto, preside uno de los puntos de la catedral.
Allí ha recibido la visita de los cuatro, que portaban el ramo de flores y la copa de la Liga. Después, el resto ha subido a presentar sus respetos a la patrona de Madrid. Sólo Lass Diarra, Nuri Sahin, Mesut Özil, Hamit Altintop, Sami Khedira, Zinedine Zidane y Karim Benzema, por su condición de musulmanes, no han acompañado al resto. Después, todos juntos, se han hecho la foto oficial.
Ahí ha acabado un acto que, entre carreras de aficionados que pedían autógrafos de camino al autobús, fue muriendo con el mismo sonido de las campanas con el que se inició.
El estadio Santiago Bernabéu acogerá la última parte de los festejos. Allí, una comida cerrará una jornada de celebraciones en el Real Madrid.