El Obispado de la diócesis de Alcalá de Henares (en la Comunidad de Madrid) ha advertido a los empleadores y trabajadores de comercios locales, de cara la celebración del próximo Domingo de Resurrección, que la práctica de la "liberalización de horarios" por la que los centros comerciales abrirán al público en virtud de la correspondiente autorización gubernativa, deben abstenerse ese día de trabajar pues el descanso festivo es un "derecho" que permite, además, el culto.
Así lo señala una nota del obispado encabezado por monseñor Juan Antonio Reig Pla y titulada "Descanso dominical, Domingo de Pascua de Resurrección y familia. Primacía de los valores del espíritu", dirigida a los fieles de la diócesis madrileña.
En ella critica que la "liberalización de horarios" autorizada por el Gobierno, influye negativamente en la vida laboral y familiar de muchos trabajadores que tienen que trabajar los domingos y festivos de descanso.
El texto recuerda la doctrina católica enunciada en el Catecismo que "el descanso festivo es un derecho" y que "los creyentes, durante el domingo y en los demás días festivos de precepto, deben abstenerse de ´trabajos o actividades que impidan el culto debido a Dios, la alegría propia del día del Señor, la práctica de las obras de misericordia y el descanso necesario del espíritu y del cuerpo´".
Asimismo recuerda que "las autoridades públicas tienen el deber de vigilar para que los ciudadanos no se vean privados, por motivos de productividad económica, de un tiempo destinado al descanso y al culto divino. Los patronos tienen una obligación análoga con respecto a sus empleados".
Aquí la nota completa del Obispado de Allcalá de Henares.
Primacía de los valores del espíritu
El próximo día 8 de abril, Domingo de Pascua de la Resurrección del Señor –la fiesta más importante de todo el año cristiano– algunos centros comerciales, radicados en territorio de la Diócesis de Alcalá de Henares, abrirán al público en virtud de la correspondiente autorización gubernativa.
Este Obispado quiere recordar a los fieles de nuestra Diócesis que, más allá de lo establecido por los Acuerdos Estado Español-Santa Sede («El Estado reconoce como días festivos todos los domingos»), el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, recogiendo las enseñanzas del Catecismo y demás Magisterio de la Iglesia, explica –quedando a salvo las legítimas excepciones (servicios esenciales y de urgencia, etc.)– que «el descanso festivo es un derecho» y que «los creyentes, durante el domingo y en los demás días festivos de precepto, deben abstenerse de “trabajos o actividades que impidan el culto debido a Dios, la alegría propia del día del Señor, la práctica de las obras de misericordia y el descanso necesario del espíritu y del cuerpo” (CEC 2185)» (n. 284). En particular, hay que subrayar, en este caso, que «las autoridades públicas tienen el deber de vigilar para que los ciudadanos no se vean privados, por motivos de productividad económica, de un tiempo destinado al descanso y al culto divino. Los patronos tienen una obligación análoga con respecto a sus empleados» (n. 286).
En esta ocasión se ve afectado el mismísimo Domingo de Pascua («El gran domingo», «Fiesta de las fiestas», «Solemnidad de las solemnidades» CEC 1169), por ello este Obispado invita a los fieles de la Diócesis a leer la Nota que, hace unos años, publicó la Conferencia Episcopal Española (LXIII Asamblea Plenaria. Domingo y sociedad, nn. 6-8, 28-041995), en la que se trataba el fenómeno, cada vez más frecuente, de la liberalización de horarios; allí se afirma que con estas prácticas se incide de forma negativa «en las familias de numerosos trabajadores, que notan en su vida familiar y laboral las consecuencias negativas de esta nueva dinámica comercial en la que prima la rentabilidad económica» (n. 6) y se añade: «los obispos renovamos nuestra petición a los responsables de la política laboral, a los empresarios y a los representantes de los trabajadores para que no cedan a la fácil tentación de eliminar poco a poco el descanso dominical basándose en la posibilidad de una mayor producción y ampliación del tiempo libre durante la semana, con detrimento de la libertad personal, de la convivencia familiar y de otros aspectos de la vida ciudadana» (n.8).
Para terminar, este Obispado invita a todos los fieles de la Diócesis de Alcalá de Henares a participar en las celebraciones de la Semana Santa y del Triduo Pascual, que culminarán en el Domingo de Pascua de la Resurrección del Señor. Que la Sagrada Familia de Nazaret interceda por las familias, por los que sufren, por los empobrecidos y por los que tienen responsabilidades sociales.
Alcalá de Henares, a 4 de abril de 2012
Miércoles Santo