La asociación Expresos Sociales ha denunciado al arzobispo de Tarragona, Jaume Pujol, ante la Fiscalía por unas declaraciones en las que, a su juicio, "instaba al odio y a la violencia contra los homosexuales".
En unas declaraciones a TV3, el arzobispo aseguró, en relación a los homosexuales, que "todas las personas son hijos de Dios (...) pero hay comportamientos que no son adecuados ni para las personas ni para la sociedad".
Pujol continúa diciendo: "La Iglesia puede hablar, pero después no obligamos a nada porque no tenemos Mossos d´Esquadra ni prisiones", según la denuncia, que recoge Europa Press.
La asociación considera que estas declaraciones "malintencionadas" impregnan a la sociedad de odio y discriminación hacia las personas que libremente ejercen su sexualidad, especialmente entre sus fieles.
Por eso ha solicitado al fiscal que abra una investigación por si estas declaraciones constituyen un delito tipificado en el Código Penal, y vulneran el principio de igualdad y discriminación que contempla el ordenamiento jurídico.