El pasado 12 de enero se celebró en Las Rozas una misa conjunta y una comida posterior entre los miembros de Hakuna y las Hijas del Amor Misericordioso, más conocidas como HAM, dos de las más pujantes realidades eclesiales recientes. Cientos de personas, entre ellos numerosos jóvenes, familias, así como las 61 religiosas de la comunidad se congregaron en el convento de San José, perteneciente hasta ahora la congregación de las concepcionistas franciscanas y que durante los últimos cuatro años fue la casa de las religiosas HAM y que a partir de ahora será el hogar de Hakuna.

Precisamente este convento fue el lugar en el que se realizó esta misa al aire libre y el que ha unido a estas dos realidades, antigua casa para unos y futura para otros, siendo esta fiesta conjunta la transición para ambas.

A continuación publicamos las sendas cartas que tanto Hakuna como las Hermanas del Amor Misericordioso han publicado sobre esta celebración conjunta que realizaron:

Carta de Hakuna

Hola a todos,

Espero que las Navidades y el estreno del nuevo año hayan sido días de paz y cercanía con el Señor.

Como muchos sabréis, estamos muy ilusionados con la suerte de poder contar, por fin, con un lugar o sede física para Hakuna, que seguro nos permitirá servir mejor a la Iglesia y desarrollar tantas actividades en las que realizamos este servicio. De todas formas, como muchos me habéis preguntado, preocupados, si es verdad que estamos ‘echando’ a unas monjas, quiero contaros a todos, una vez más, pero con más detalle, la verdad acerca de todo esto.

Para entendernos, comencemos por decir que aquí hay tres instituciones implicadas. Las propietarias (la Congregación de las Concepcionistas franciscanas), las que están de prestado habitándolo con compromiso formal y escrito de abandonar en un mes a partir del momento de la venta (las HAM), y los compradores (Hakuna). Hablemos de la situación de cada una.

Concepcionistas.  La propiedad del Convento de San José de Las Rozas es de las Concepcionistas Franciscanas. Esta congregación, fundada en el siglo XV, lleva cinco años intentando vender el convento de Las Rozas. Tienen un Broker a quien encargó la venta de este inmueble.  En junio, en un viaje, de manera providencial, coincidí con la Presidenta de la Federación de las Concepcionistas. Conociéndonos ya, en un momento me hizo una propuesta: si nos interesaría comprar el Convento que tenían a la venta en Madrid, y que me lo enseñaría en su siguiente viaje —vive en otra ciudad—. Así lo hicimos.

Hijas del Amor Misericordioso (HAM).  Al saber que las Concepcionistas desalojaban el Convento de San José, las HAM les pidieron estar ahí, de prestado, durante un año, a la espera de la venta, con el compromiso de desalojarlo en el plazo de un mes a partir de la fecha de compra. Como pasado el año las propietarias continuaban sin venderlo, al final han estado cuatro años. Durante estos años, el Broker ha realizado 29 visitas con posibles compradores al inmueble; cualquiera de ellos podría haberlo comprado, pero ninguna operación llegó a cuajar por distintos motivos. Durante estos años, el Broker ha propuesto a las HAM que lo comprasen, pero siempre dijeron que no: afirman con claridad que nunca han querido comprarlo porque no es el lugar que ellas desean como sede definitiva para ellas.

Hakuna.  Estábamos buscando algún lugar en Madrid que fuese la sede donde realizar muchas de nuestras actividades. Es importante en una institución, tan dispersa geográficamente, contar con algún lugar que sirva como instrumento de unidad, donde realizar encuentros, además de muchas actividades para las que estamos pidiendo de prestado que nos dejen lugar: God Break, grupos de vida o revolcaderos, catequesis, cursos prematrimoniales, cursos preparación de los matrimonios guía, Hemiciclos, acompañamiento espiritual, reuniones de coordinación, convocatorias previas informativas y organizativas de Escapadas, ensayos de Hakuna Group Music, sesiones de los grupos Wardians, Curso de Acompañamiento espiritual, sedes para God Stop Stop, reuniones de Staff de Grupos, etc. En alguna ocasión lo había hablado con el Cardenal Carlos Osoro, planteándole esta necesidad nuestra: estábamos los dos buscando alguna posibilidad, pero no había surgido.

Después del verano hemos estudiado la posibilidad de comprarlo, en conversación con las propietarias, viendo nuestras posibilidades y la conveniencia, y al final nos ha parecido que era una buena opción. Nos decidimos a la compra, que acordamos en el mes de noviembre.

El Broker de las Concepcionistas informó a las HAM de la venta de parte de las propietarias. En un mes debían desalojar el convento, según contrato.

En la primera entrevista que, a continuación, tuvieron quienes llevaban la gestión de compra por parte de Hakuna, a quienes acompañé, transmitimos a Marimí, la Superiora de las HAM, que no se preocupasen con los plazos, pues lo primero eran ellas, y que les ayudaríamos en lo que estuviese de nuestra parte.

En el mes de enero desalojábamos el Estudio de Hakuna: el mes de noviembre recibimos un burofax de la comunidad de vecinos pidiendo una orden de desalojo, pues en el piso había demasiado tráfico de personas (es cierto que había días que pasaban cien y doscientas personas por el Estudio: aunque éramos buenos vecinos, les incomodaba tanto movimiento): aunque podíamos recurrir esa orden, vimos que lo mejor era abandonarlo.

Los últimos días de diciembre, acordando todo previamente con las responsables de las HAM, para no causarles incomodidades, empezamos una pequeñas tareas de acondicionamiento de algunas habitaciones: pintura y un parqué en el suelo: poco más.

Este tiempo de compartir vida Hakuna con las HAM ha sido un regalo de Dios. Hemos palpado la unidad de la Iglesia: las HAM han tenido tantos detalles de delicadeza con nosotros, disponibles para cualquier necesidad nuestra, ordenando las cosas de modo que pudiésemos tener las actividades que necesitábamos realizar allí, preparándonos la Misa, etc. Me ha sorprendido que algunos me preguntasen si nos llevábamos bien las HAM y Hakuna: nos queremos un montón, y nos ayudamos en lo que podemos.

Una actividad que queremos hacer, y así lo estamos preparando, es celebrar una Misa juntos, las HAM y Hakuna. Quisimos hacerla durante las Navidades, pero ellas no podían porque estaban de retiro. Pero la celebraremos el próximo domingo 12 enero, a las 13.00 horas, y luego comeremos todos juntos allí mismo, con lo que llevemos. Todos podremos disfrutar de los cantos de las HAM y de Hakuna. Además, compartiremos juntos un par de buenas paellas gigantes.

Una reflexión quiero añadir. Me escribía una persona apenada porque las HAM estaban como el Niño Dios, en un portal, sin posada. Creo que hay que tener cuidado con estas imágenes, pues el Niño está sin posada porque había unos desalmados que le rechazan, y un Herodes que vive en un castillo y actuará contra él. Advierto del cuidado, porque implícitamente, sin querer, si las HAM están como el Niño, ¿quién es el desalmado, quién el Herodes en esta ocasión? Y no es así.

Como me decían ayer las hermanas Marimí y María José, cada vez que les dicen que les están echando, ellas lo corrigen: «Nadie nos echa; sencillamente nos dejaron estar un tiempo, y ese tiempo se ha acabado».

Os digo, para terminar, que las HAM están muy agradecidas a las Concepcionistas por estos años que han podido disfrutar de ese Convento, y a Hakuna por la flexibilidad en el desalojo (si lo llega a comprar una empresa para hacer una residencia de ancianos o un hotel, muy probablemente las HAM hubiesen estado fuera de ese Convento en diciembre).

José Pedro Manglano

Carta de las Hermanas del Amor Misericordioso (HAM)

Queridos hermanos:

Espero que estos días de Navidad hayan sido días llenos de gracia, de luz y de alegría. Para la comunidad han sido días en los que hemos podido palpar la cercanía del amor de Dios y la alegría de nuestra entrega a Él y de su entrega a nosotros. Nos alegramos mucho de poder compartir con bastante de vosotros el día de la Sagrada Familia. Para todos fue un día muy especial de gozo y comunión.

Estamos muy agradecidas al Señor por habernos concedido vivir estos casi cuatro años en el convento de Las Rozas, donde muchos de vuestros hijos han podido jugar a la vez que conocer más al Señor. La generosidad de las Franciscanas Concepcionistas han permitido todo esto.

Como ya sabéis y estuvimos hablando, el Señor ha concluido esta etapa de Las Rozas. Ya sabéis la alegría que brotó de nuestro corazón cuando recibimos la noticia. Una vez más veíamos la mano de nuestro Padre Dios dirigiendo nuestra vida y haciendo Su voluntad en la comunidad.

Junto con nuestra alegría, también ha brotado en vosotros la preocupación por la incertidumbre de nuestro destino. Esta preocupación ha podido llevar a algunos, más por aprecio y cariño a nosotras que por otra cosa, a interpretar la situación como un desacuerdo entre los nuevos propietarios, Hakuna, y nosotras. Según la Ley, deberíamos haber salido el 21 de Diciembre, pero ante nuestra situación de precariedad, nos han prorrogado la estancia por dos meses más para que podemos hacer la salida del convento teniendo ya un sitio donde ir. De hecho, como todos sabéis, estamos buscando una nueva residencia para poder mudarnos lo antes posible. Agradecemos a Hakuna el tener en cuenta nuestras circunstancias para hacernos más fácil este momento que estamos viviendo de la mano del Señor.

Por todo esto, Don José Pedro Manglano y yo hemos visto la necesidad  de hacer un encuentro común. Hubiéramos deseado haberlo hecho antes de Reyes pero no ha podido ser. Por eso, estamos muy ilusionados en compartir juntos este domingo la Eucaristía que celebraremos a las 13:00 h. Quizá tengamos que celebrarla al aire libre, pues esperamos que seamos muchos. Después tomaremos juntos un aperitivo. De este modo, podremos visualizar la comunión y riqueza de la Iglesia en sus distintos movimientos.

Estoy segura que seguís rezando para que el Señor siga iluminando nuestros pasos y nos lleve allí donde Él sabe que vamos a seguir haciendo su voluntad y le vamos a dar gloria.

Marimí, HAM