Como cada año y a pesar de que la pandemia de coronavirus todavía sigue muy presentes, los monjes benedictinos de la abadía de Santo Domingo de Silos, de la Congregación de Solesmes, ha vuelto a organizar su “experiencia monástica” este verano.
Este año se celebrará del 26 de julio al 1 de agosto y están invitados hombres de entre 18 y 45 años que crean que pueden estar llamados a una vida monástica.
Según explican los benedictinos de Silos, esta “experiencia monástica es una ocasión para pasar unos días en el seno de nuestra comunidad y ser acompañados en la reflexión sobre la vocación y los medios adecuados para responder al amor de Dios. La experiencia implica una progresiva introducción de los participantes en el ora et labora de la vida monástica. Estos trabajarán con los monjes y recibirán charlas de formación en la que se les introducirá en los principales aspectos de la vida monástica: oración litúrgica mediante el canto gregoriano, lectio divina, silencio, vida fraterna, etc”.
Los benedictinos señalan que “la finalidad última es orientar y ayudar a aquellos que se sienten llamados a una vida de seguimiento radical del Señor”. Y para llevar a cabo “esta tarea de discernimiento se facilitará acompañamiento espiritual a cada uno de los participantes, y se posibilitará el encuentro y diálogo con los monjes.
El horario que seguirán los participantes durante esta semana será el siguiente:
06:00 Vigilias
07:30 Laudes
08:10 Desayuno
09:00 Eucaristía
10:30 Conferencia
12:00 Actividad de la mañana
13:45 Sexta
14:00 Comida/recreo/descanso
16:10 Nona
16:30 Conferencia/actividad de la tarde
19:00 Vísperas
19:50 Lectio divina compartida
20:30 Cena/recreo
21:40 Completas
22:15 Descanso nocturno
Los monjes recuerdan que las inscripciones han de realizarse antes del 15 de julio.
Para más información e inscripciones pinche AQUÍ.
También puede realizar la inscripción a través de la dirección de correo: info@sermonje.eu
Deberá indicar el nombre y apellidos, edad, lugar de residencia, teléfono, dirección de correo electrónico y motivo por el que se quiere participar en la experiencia monástica.