Dentro del Congreso Católicos y Vida Pública que celebra la Fundación San Pablo CEU este fin de semana tuvo lugar una mesa redonda en torno a las relaciones Iglesia-Estado y los conceptos de laicidad, laicismo y convivencia.

Una de las intervenciones correspondió a Javier Barraycoa, profesor de Sociología de la Universidad de Barcelona y vicerrector de la Universidad Abat Oliba de la Ciudad Condal. El autor del reciente ensayo Historias ocultadas del nacionalismo catalán (LibrosLibres) recordó que "la autoridad viene de Dios" y criticó la consideración de lo espiritual como algo “reducido a la esfera de lo individual y separado de la vida pública”.
 
Afirmó que el ámbito religioso y el civil poseen una autonomía respectiva, pero al mismo tiempo mantienen ámbitos comunes, aunque existe “un factor de subordinación del segundo al primero en cuanto a lo moral”. Por ello, “lo temporal no tiene una autonomía absoluta”.

Barraycoa explicó el concepto de "sana laicidad", término acuñado por Benedicto XVI, y demostró que el Estado laico moderno "no es neutral", sino que  "arrastra secuelas del proceso de apostasía en Occidente y ha llevado a una negación de la tradición católica”.

Por último, y con el tema candente por la cercanía del proceso electoral, dedicó unos minutos a aclarar conceptos en torno a las teorías del "mal menor" como opción política.