Los Mossos d´Esquadra han detenido en Gerona a Marcelo R.O, de nacionalidad colombiana, bajo la acusación de haber decapitado a su hija de 18 meses en presencia de su otra hija de seis.
Según confesó el detenido, cometió esta acción porque se lo había ordenado el demonio. Fue él mismo quien llamó a la Policía para informar del asesinato. Cuando llegaron los agentes se encontraron efectivamente el cadáver de la pequeña, mientras su hermana estaba viendo la televisión.
Según informa Europa Press, una de las vecinas declaró haber escuchado, antes del crimen, gritos, lloros e incluso "sonidos guturales", aunque afirmando también que la familia era aparentemente normal. La madre de la niña no se encontraba en casa y tuvo que ser atendida al llegar a casa, informada de los acontecimientos.
"Nunca, nunca, nunca he oído gritos ni discusiones, y hubiera puesto la mano en el fuego por él, incluso le hubiera ayudado en cualquier cosa que me hubiera pedido", ha relatado una de las vecinas del presunto asesino, que llevaba viviendo en la casa dos años junto con su familia.