El cardenal y prefecto de la Congregación para el Culto Divino, Antonio Cañizares, ha elogiado ayer en Ávila la "gran labor" de los periodistas en la búsqueda de la verdad, al mismo tiempo que ha subrayado la "gran influencia" de los medios de información para hacer "una sociedad libre".

Cañizares ha realizado estas declaraciones a los periodistas, minutos antes de pronunciar la conferencia que ha servido para clausurar la Escuela de Verano de la Universidad Católica de Ávila (UCAv), que desde el pasado martes se ha celebrado en la capital abulense bajo el título "Verdad y medios de comunicación".

En este marco, y acompañado por la rectora de la UCAv, María del Rosario Sáez Yuguero, el cardenal se ha referido a los periodistas como "profesionales de la verdad", encomiando su "gran labor en este sentido".

En este contexto, ha subrayado igualmente la "gran influencia" que los medios de información tienen a la hora de hacer una "sociedad libre, que se apoye en la verdad, o para destruir también la propia sociedad".

"Los medios están configurando enteramente nuestra sociedad. La manera de pensar, de sentir, de actuar. Están formado un mundo nuevo y con ello un nuevo tipo de hombre. Que uno sea lo uno o lo otro depende de lo que los demás le comuniquen, lo cual indica la gran responsabilidad que tienen. Pueden contribuir a hacer una sociedad libre o de esclavos por no servir a la verdad o por estar bajo el dominio de poderes ideológicos, económicos, políticos...", explicó el cardenal

Y añadió: "No es fácil ser periodista, pero ciertamente es muy apasionante, porque su tarea al servicio de la verdad es indispensable en estos momentos y no se realiza en un contexto cultural fácil, pues está marcado por el relativismo o por el ocultamiento de la verdad. No se aprecia la verdad, se considera que es hablar de intransigencia o de dogmatismo, cuando sólo con la verdad podemos llevar a cabo esa comunión de personas. Vivimos en un contexto cultural en el que estamos todos obligados a la verdad y los medios están obligados, por el influjo que tienen, a ser fieles a ella. Porque los medios, llamados la segunda escuela, tienen a veces más influencia que la escuela o que la propia familia".

Asimismo, se ha referido a los "riesgos" que la cultura actual de "relativismo" tiene y cómo ese relativismo "está carcomiendo en el fondo la propia sociedad".

"La verdad no la creamos nosotros, la verdad está ahí y nosotros, sencillamente para ser servidores de la verdad, hemos de tener muy presente al hombre", ha reflexionado, antes de concluir: "Cuando se tiene siempre en cuenta el hombre y el bien del hombre, la verdad la tenemos ahí".

A juicio del ministro de Liturgia del Papa, "llegar a la verdad es posible y es necesario para el hombre. Hemos de estar atentos a la quiebra de nuestra sociedad, que sufre una crisis, que no es sólo económica, sino de aquello que sustenta a la persona humana, una crisis moral, una quiebra de humanidad, es el hombre que se rompe. Está en juego, en definitiva, la suerte misma del hombre. Cierto es que los medios no son lugares para hablar de moral, pero sí de verdad".

"Esta crisis crea desconcierto e incluso una sensación de sálvese quien pueda, que lleva a la lucha, al enfrentamiento, a dejar a muchos en la cuneta del abandono y se llega también a una especie de comportamiento a la carta, y eso también ocurre en la Iglesia, donde hay un cristianismo a la carta. Nos encontramos ante una quiebra moral. Nuestra misma esencia indica una naturaleza que no es inventada por nosotros".

"Estamos acostumbrados a que la realidad del hombre, la gramática del hombre sea negada una y mil veces constantemente, cuando se está produciendo una quiebra de derechos humanos fundamentales, como el derecho a la vida, tratado sólo como una cuestión política. No es esto. Detrás del derecho a la vida, qué se está diciendo. Si esto sólo se reduce a estrategias, a cuestiones de procedimiento, a consensos, estamos olvidando al hombre mismo".

Por último, pidió a los medios que apuesten por la familia. "Los medios de comunicación pueden generar una nueva civilización basada en el amor, en el respeto a los derechos humanos si se sostienen en una verdad. Tienen una responsabilidad total, compartida con toda la sociedad, que es una labor educativa para que el hombre sea hombre, para que alcance la verdadera humanidad. De este reto fundamental en defensa de la vida resulta también inseparable otro reto que es la defensa de la familia. Es necesario que los medios apuesten por la familia.

Cuando los medios atacan a la familia, vulneran a la verdad. Sólo sobre la base de la familia se sustenta la verdad del hombre y esto me lleva a un aspecto muy concreto, como aberraciones auténticas en el campo de la sexualidad, pues se está yendo contra el propio hombre".

Por su parte, María del Rosario Sáez Yuguero ha agradecido la presencia en la clausura de la Escuela de Verano del cardenal Cañizares, tres días después de que la inaugurara el expresidente del Gobierno José María Aznar.