Luca Volonté, presidente del Grupo Popular Europeo en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, lanzó un llamamiento urgente a los cristianos europeos a ocupar los espacios públicos ya que "vivimos en una crisis del modelo, del consumismo y también del relativismo".

"Es una oportunidad. Pero si los cristianos no la aprovechan, el espacio público será ocupado por otros: no estará permanentemente abierto. Y si no lo hacemos, se iniciará la cuesta abajo", explicó el parlamentario.

Fue en el marco de un desayuno de trabajo realizado en Madrid el pasado martes y convocado por la asociación “Profesionales por la ética” en el que el parlamentario italiano expuso el tema “Principios y política en Europa: paradojas y posibilidades de acción”.

En su intervención, Volonté explicó entre otras muchas cosas,  que "la visión de los derechos humanos desde una perspectiva cristiana o natural no está en las instituciones europeas. Toda la interpretación se hace desde una perspectiva formal o desde la ideología de género. Y hay derechos humanos que no defiende nadie. Tenemos que abrir una discusión en la sociedad y en los medios".

Por otro lado señaló que "el mito del hombre nuevo no solo es propio de los regímenes socialistas. Esta ideología elimina a los diferentes, debe separar a los que no se homologan", afirmó con contundencia.

El parlamentario comenzó preguntándose “¿cuáles son los valores fundamentales para la política?·, a los que se contestó razonando que "creo que para un cristiano hay algo más, hay valores no negociables, sobre los que no hay posibilidad alguna de mediación”.  Se lamentó afirmando que "quieren hacernos creer que no hay diferencia entre verdad y mentira, entre vida y muerte. Y ahora quieren matar a los abuelos porque no son útiles":

Respecto a la repuesta que los políticos deberían de dar frente a las violaciones de los derechos fundamentales, Volonté lo explicó refiriéndose a Europa diciendo que "allí se respeta la libertad religiosa. Obvio pero falso. Obvio porque en todos los países europeos este principio es declarado, pero falso porque los ejemplos de cristianofobia que se dan en países de Europa no lo demuestran”.

En cuanto a la recientemente aprobada constitución del ex país soviético, el diputado italiano comentó que “se centra en la bendición de Dios sobre el pueblo, las raíces cristianas y los valores de la vida desde la concepción y de la familia fundada en el matrimonio de un hombre y una mujer”. 

“La mayoría de los medios de comunicación de Europa, empujados por los partidos liberales y socialistas, tacharon esta Carta Fundamental de retrógada, ultra-conservadora y antieuropea”, añadió.

Explicó también que “en esta carta, hay amplias referencias a los derechos humanos, a las declaraciones universales y a las tradiciones europeas. Esto sucedió debido al nivel de la confrontación ha subido, el nuevo anticristianismo no puede contestarse ya con condicionar a las personas, ni con intimidar a la iglesia, sino que debe tratar de censurar a los pueblos y naciones”.

Ante el momento que atraviesa actualmente Europa, Volonté apuntó algunas pautas de acción:

En primer lugar "vivir en la verdad de nuestra amistad, vivir en la sociedad, en nuestra profesión, sin censura, y sin ningún tipo de sometimiento psicológico”.

Asimismo apuntó que “la verdad debe de realizarse poco a poco en la vida real. Quiero empujaros aún más a trabajar juntos, los médicos y los laicos pro-vida, los abogados y los políticos, las familias y los estudiantes universitarios: una amistad de mira a Cristo es capaz de todo”.

En último lugar, dijo que “hay que volver a empezar desde el hombre. Nosotros tenemos el deber histórico, en España y en el resto de Europa, de relanzar esta verdad y despertar el anhelo”.