Florida, el tercer estado más poblado de EEUU (21 millones de habitantes, superado sólo por Texas y California), ha prohibido el aborto de fetos de 15 semanas de gestación o más, en una norma que entrará en vigor el 1 de julio. Hasta ahora, los abortos en Florida estaban permitidos hasta la semana 24 de gestación.
A las 15 semanas, hay madres que ya sienten los movimientos de su hijo en el útero: en una semana el feto es capaz de doblar su peso. Ya sus brazos le permiten acercar las manos a la cara y algunos ya aparecen en ecografía chupándose el dedo. También detectan sonidos.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, del Partido Republicano, firmó la norma con una ceremonia pública. «Estamos aquí hoy para proteger la vida», dijo DeSantis. «Estamos aquí hoy para defender a aquellos que no pueden defenderse a sí mismos».
Días antes, el Senado del Estado voto por 23 votos a favor y 15 en contra la llamada Ley de Reducción de la Mortalidad Fetal e Infantil (Reducing Fetal and Infant Mortality Act, House Bill 5).
El Gobernador dio algunos datos de a quién protege esta ley: «Tienen corazones latiendo. Pueden moverse, pueden saborear, pueden ver, pueden sentir dolor, pueden chuparse el dedo y tienen ondas cerebrales».
La ley también incluye medidas para reducir la mortalidad infantil y el requisito de que los centros de aborto informen al estado de los casos sospechosos de trata de personas (puesto que los traficantes usan a las menores o a mujeres traficadas o esclavizadas para la prostitución y las llevan a abortar a los abortorios).
Los grupos provida consideran que esta ley mejora la situación frente a la anterior, aunque mantiene el aborto bajo el supuesto de riesgo para la vida de la madre o de enfermedad mortal del feto.
Salvará unos 5.000 bebés al año
Andrew Shirvell, del grupo provida Florida Voice for the Unborn, detalló a LifeNews que es la norma que más protege al no nacido desde 1973, cuando el Tribunal Supremo de EEUU impuso el aborto con la sentencia Roe vs Wade (no es algo que votara el pueblo).
Shirvel calcula que esta ley salvará hasta cinco mil bebés cada año.
Los obispos católicos de Florida felicitan a los impulsores de la ley con una nota que han difundido, "agradecidos por el compromiso del Gobernador DeSantis de defender a los niños por nacer y sus madres. El liderazgo del gobernador y su apoyo a la prohibición de los abortos después de las 15 semanas de gestación alentaron a la legislatura a aceptar y aprobar la HB 5. Aplaudimos su aprobación de esta ley histórica".
“También elogiamos a los líderes legislativos de Florida y especialmente a los patrocinadores del proyecto de ley, la Senadora Kelli Stargel (R-Lakeland) y la Representante Erin Grall (R-Vero Beach), quienes valientemente cumplieron la difícil tarea de hacer avanzar el proyecto de ley", añaden los obispos.
“Aunque aún queda trabajo por hacer, la firma del proyecto de ley de hoy marca un progreso significativo hacia el pleno reconocimiento legal de los niños por nacer. Además, los obispos de Florida mantienen su compromiso de apoyar a las madres necesitadas durante sus embarazos a través de parroquias y otros ministerios, y la red de centros de embarazo en toda Florida”.
En Florida hay 7 diócesis, 12 obispos y 475 parroquias. Se calcula que un 21% de la población es católica. Cuatro de cada 10 católicos de Florida son hispanos.
Avances en otros Estados
Esta norma se suma a otros avances provida en estados de EEUU. Recientemente Kentucky anuló el veto del gobernador demócrata Andy Beshear a un amplio proyecto de ley sobre el aborto que prohíbe la mayoría de los abortos después de las 15 semanas de embarazo.
Y en Oklahoma, el gobernador republicano Kevin Stitt aprobó un proyecto de ley que convierte en ilegal la práctica del aborto en el estado, con una sola excepción en caso de emergencia médica.