Ante el misterio del mal y la muerte, sólo queda la oración. El pueblo de Newton, en Connecticut, EEUU, ha quedado sobrecogido por el asesinato de al menos 27 personas, entre ellas 18 niños de guardería, en el colegio públicoSandy Hook, al parecer por disparos causados por un joven padre de 20 años. Entre las víctimas está, según la CNN, la directora y el psicólogo del centro.
En Newton sólo hay una parroquia católica, Santa Rosa de Lima (http://www.strosechurch.com) que ha convocado una misa a las siete de la tarde del viernes (hora local) y mantendrá abierta la parroquia toda la noche, convocando a una oración continuada en el templo por 24 horas. También ha clausurado sus actividades educativas del sábado por la tarde, aunque no una oración pre-navideña del sábado.
La parroquia invita a todos a unirse en la oración por las víctimas y los supervivientes.
Brian Wallace, director de comunicaciones de la diócesis de Bridgeport, en donde se encuentra la escuela Sandy Hook donde ocurrieron los hechos, dijo a Aciprensa.com que los sacerdotes de la parroquia enseguida salieron a las calles para atender a los afectados.
Wallace dijo que "sólo pasaron algunos minutos antes de que el párroco, Bob Weiss, llegara a la escena del crimen asistiendo a las familias" de las víctimas.
"Rápidamente él alertó a otros sacerdotes de la parroquia quienes lo acompañaron. A medida que la crisis fue creciendo, dimos aviso al clero en la zona de Danbury", agregó.
Wallace dijo que los asesinatos han tenido un profundo impacto en la comunidad y "nos sentimos desorientados por esto. Es sumamente chocante. Es un momento muy difícil y creo que va a empeorar. Nos dicen que hay varios niños entre los asesinados".
El director de Comunicaciones explicó además a ACI Prensa que "nuestros capellanes en los hospitales también están atendiendo a las personas. Nuestros sacerdotes en la escena están haciendo todo lo que pueden para sostener a las familias que están de luto y con aquellos que no pero que han quedado traumatizados con lo que ha pasado".
La escuela Sandy Hook alberga a niños de entre cinco y 10 años. Newtown, con una población de 27.000 habitantes, se encuentra a unos 128 kilómetros al noreste de Nueva York. Todas las escuelas del pueblo fueron cerradas tras el tiroteo.