La orden del Santo Sepulcro en España tiene en la Real Colegiata del Santo Sepulcro de Tarazona su Casa Madre. Y esta semana la Santa Sede ha comunicado al obispo de esta diócesis, Eusebio Hernández Sola, de concederla el título de basílica.
En nombre del Papa, la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, decidió convertir en basílica esta histórica iglesia, convirtiéndose así en el primer templo diocesano en ostentar el título de basílica.
Tal y como informa Iglesia en Aragón, a finales de 2019 el Cabildo del Santo Sepulcro solicitó al obispo de Tarazona la petición del título de basílica para la Colegiata dado su carácter histórico (es casa madre de la Orden del Santo Sepulcro en España, y la primera fundación del mundo fuera de Jerusalén) y artístico (es un edificio único por su recorrido iconográfico exclusivamente dedicado a la Pasión, Muerte y Resurrección), además de ser un centro de peregrinación para la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén.
Una vez aceptada la propuesta por el obispo, se comenzó a trabajar un amplio cuestionario donde se solicitaban datos que permitiesen ver que se trata de una iglesia donde se cuida el culto y la liturgia, se ofrecen posibilidades de formación a los fieles, hay especial esmero en la atención caritativa y social, y se fomentaran las distintas actividades pastorales.
Además de todo esto, hubo que “dedicar” el templo, un rito litúrgico que llevó a cabo el propio obispo el día 23 de febrero de este año.
Una vez recibido el decreto se llevará a cabo el acto de proclamación solemne de la basílica, aunque todavía no hay fecha, debido a la situación que atravesamos. No obstante ya se puede afirmar que Calatayud cuenta con una basílica. Entre los privilegios de los que podrán disfrutar los fieles, está la obtención de la indulgencia plenaria en varios días señalados cada año, así como en uno que ellos mismos elijan.