La protagonista de la secuela de Disney ‘Frozen 2’ no se destapará como el primer gran personaje del estudio que se muestra de manera abierta como parte de la comunidad LGTBI, tal y como ha confirmado Kristen Anderson-López, miembro del equipo de de composición musical de la película a IGN.
"No queremos mostrar el amor romántico sino cómo con esos poderes puedes crecer y cambiar y encontrar tu sitio en el mundo y encontrar respuestas que no hayan sido encontradas previamente”, ha explicado Anderson-López.
La cuestión sobre una posible homosexualidad de la princesa Elsa ha estado presente en los últimos años desde que se anunciara la puesta en marcha de la segunda parte del éxito mundial cuya banda sonora ‘Let it GO’ fue adoptada por el lobby LGTBI como uno de sus himnos.
Además de las especulaciones alentadas por los grupos LGTBI y por la cada vez más importante deriva oficial LGTBI de la propia compañía, la aparición de un nuevo personaje femenino en los adelantos filtrados por Disney hizo más intenso el debate.
Los grupos de presión LGTBI organizaron campañas para reclamar el lesbianismo abierto de la protagonista a través de etiquetas en redes sociales como #GiveElsaAGirlFriend que se convirtió en tendencia mundial impulsado por el grupo LGTBI GLAAD que previamente había criticado que ninguna de las 11 películas estrenadas en 2015 por Disney tenía un personaje abiertamente LGTBI.
Por su lado, los defensores de preservar la infancia de este tipo de contenidos que desnaturalizan el amor humano y degradan el sentido de instituciones como el matrimonio y la familia también se han movilizado.
Así, más de 350.000 personas se han sumado a la movilización promovida en la plataforma CitizenGO, iniciada en mayo de 2016 que animaba a los dirigentes de la factoría de ficción infantil a desoír las presiones de los grupos de presión LGTBI mantenerse fieles «a su público y a su espíritu original: ayudar a los niños a soñar con valores eternos: el amor, la amistad, la fidelidad, la generosidad, etc.».
En el mismo sentido, la plataforma CitizenGO impulsó otra campaña en junio de 2019, que reclama a Disney que "no ataque la inocencia de los niños" a través de actividades alineadas con la ideología de género y los grupos de presión LGTBI.
En concreto, la petición estaba motivada por la organización de fiestas LGTBI infantiles en sus parques temáticos lo que a su juicio supone "matar la inocencia de unos niños que buscan la magia" y por tanto hacer "exactamente lo contrario de su espíritu fundacional".
Pero la petición se extendía no sólo a las actividades de los parques, "sino también en sus películas, su canal de TV, sus libros y su merchandising", de tal manera que sus firmantes exponen a Disney su intención de buscar otras formas de ocio para sus hijo si no abandonan actividades adoctrinadoras que siguen los dogmas de la ideología de género: "No es lo que quiero para mis hijos. Así que si mantienen su intención adoctrinadora, buscaré otras alternativas de ocio".