El 2 de abril de 2005 falleció Juan Pablo II tras un largo deterioro físico y el tercer pontificado más largo de la Historia, solo superado por los de San Pedro y el Beato Pío IX. Beatificado en 2011 y canonizado en 2014, quince años después de su desaparición su figura continúa siendo venerada por millones de personas, que no han olvidado la energía que infundió a la Iglesia y la huella que dejó en toda una generación de católicos.
Es el caso del escritor y director José María Zavala, quien le considera "un santo que murió con las botas puestas" porque no quiso regatear al mundo aquellas "imágenes patéticas, cuando ya no podía hablar ni caminar, asediado por el Parkinson, pero en lucha constante, sin cuartel, por no darse por vencido, porque confió en Dios hasta las últimas consecuencias".
Zavala está terminando de montar, una vez concluido el rodaje, su tercera película, que sigue a El misterio del Padre Pío (2018) y Renacidos (2019). Se trata de Wojtyla. La investigación, que debía estrenarse el 15 de mayo, tres días antes del centenario del nacimiento del Papa polaco, y se ha visto retrasada hasta "cuando Dios quiera" a consecuencia del confinamiento forzoso de la población por la pandemia de coronavirus.
Como cortesía para los lectores de ReL, Zavala ha querido compartir dos cortes de la banda sonora original (BSO) de la película, obra de Javier de la Cruz.
Uno acompaña al momento del atentado que sufrió el Papa el 13 de mayo de 1981 en la Plaza de San Pedro, por disparos de Ali Agca que alcanzaron su cuerpo en cuatro puntos, dos en el estómago, un brazo y una mano. Perdió mucha sangre y su vida corrió peligro, exigiendo seis horas de operación y unas lesiones intestinales que le generaron molestias el resto de su vida.
BSO Wojtyla: el atentado del 13 de mayo de 1981
El segundo corte acompaña la narración de otros atentados, menos conocidos, que se intentaron contra la vida de Juan Pablo II.
BSO Wojtyla: otros atentados
Según Zavala, que conoce bien a ambos porque ha consagrado además al santo de Pietrelcina dos libros (Padre Pío y El Santo), "el sentido del sufrimiento de San Juan Pablo II era muy parecido al del Padre Pío, al que conoció. La cruz fue siempre la primera palabra de su vocabulario".
El director de Wojtyla concluye recordando "su preocupación especial por sembrar en el corazón de los jóvenes el amor a Cristo", y aquellas célebres palabras en Chile, al inicio de su pontificado: "No os avergoncéis de Cristo, no tengáis miedo de mirarle a Él". Un mensaje que, confiesa, le sigue "conmoviendo".
Pincha aquí para contribuir económicamente a la producción y distribución de Wojtyla.