El Ayuntamiento de Vila-real (Castellón), en colaboración con la Sociedad Bíblica de España y la Acadèmia Valenciana de la Llengua organiza este mes de febrero uans Jornadas de Traducción y Literatura Religiosa Medieval y la exposición «Bíblia i cultura».
El concejal Santi Cortells, presentando la exposición, ha declarado que "la Biblia es un texto capital para nuestra historia, tradición, literatura, arte e incluso arquitectura. Sus textos son fundamentales para entender quiénes somos en estos y otros muchos ámbitos".
Un libro legendario: la Biblia valenciana de 1478
Las jornadas quieren difundir uno de los libros más peculiares del mundo, del que queda solo una hoja impresa (dos páginas): la Biblia Valenciana, traducida del latín al valenciano por (en principio) Bonifacio Ferrer, hermano de San Vicente Ferrer, en algún momento anterior a su muerte en 1417, e impresa en 1478 por el impresor Lambert Palmart.
Se considera que esta Biblia en valenciano de 1478 es la tercera Biblia impresa en lengua moderna, después de la impresión de una traducción alemana en 1466 y la de una traducción italiana en 1471. El primer libro de "gran tirada" impreso fue la Biblia en latín de Johannes Gutemberg de 1454 o 1455 (en realidad fueron unos 180 ejemplares muy voluminosos).
Mitad inferior de la página final (única hoja que sobrevive) de la Biblia valenciana
El concejal Santi Cortells anunció que "reivindicaremos también la Bíblia Valenciana traducida por fray Bonifacio Ferrer, hermano de san Vicente Ferrer, que fue la cuarta Biblia en ser imprimida de todo el mundo, de la cual solo nos queda una página del Apocalipsis en la Hispanic Society de Nueva York, de la cual se mostrará una reproducción", añade.
Una Biblia "muy católica", 5 años antes de nacer Lutero... pero con errores
En esa página se puede leer el final del Apocalipsis y un párrafo de agradecimientos del impresor, fechado en 1478, declarando que se trata de una Biblia "muy verdadera y católica" y reconocida por el inquisidor de Valencia Jaume Borrell. Traducimos el texto al castellano, lleno de datos sobre sus responsables:
"Gracias infinitas sean dadas al Omnipotente Dios y Señor Nuestro Jesucristo y a la humilde y sacratísima Virgen Madre suya. Acaba la Biblia muy verdadera y católica, sacada de una biblia del noble mosén Berenguer Vives de Boil, caballero [mosén era en la época un título de nobleza, no eclesial; nota de ReL], la cual fue trasladada de aquella propia que fue arromanzada en el monasterio de Portaceli de lengua latina a la nuestra valenciana por el muy reverendo señor Bonifaci Ferrer, doctor en cada Derecho y en Facultad de Sacra Teología, y don de toda la Cartuja; hermano del bienaventurado San Vicente Ferrer, del Orden de Predicadores, en cuya traducción hubo otros singulares hombres de ciencia. Y ahora, recientemente, ésta ha sido diligentemente corregida, vista y reconocida por el reverendo maestro Jaume Borrell, maestro en Sacra Teología de la Orden de Predicadores e inquisidor en el Reino de Valencia. Se ha impreso en la ciudad de Valencia financiada por el magnífico Philip Vizlant, mercader de la vila de Jsne de Alta Alemania, por el Maestro Alfonso Fenandez de Córdova, del Reino de Castilla, y por el Maestro Lambert Palomar Alamany, maestro en artes. Comenzada en el mes de febrero del año 1477 y acabada en el mes de marzo del año mil CCCCLXXVIII".
La hoja superviviente, como un viaje en el tiempo hacia 1478, puede consultarse con detalle aquí.
Aún faltaban 5 años para que naciera en Alemania el bebé Martín Lutero y faltaban 30 años para que el alemán empezase a hacer sus propios traducciones de la Biblia.
Una investigación detallada... y todos los ejemplares fueron destruidos
A la Inquisición en esta época, en principio, no le parecía mal que hubiese una buena traducción impresa de la Biblia en valenciano.
Sin embargo, 4 años después la Inquisición ordenó una investigación larga y detallada, encontró errores graves y ordenó retirar y quemar los ejemplares (que serían unas docenas, o como mucho, un par de cientos).
La entrada en catalán en Wikipedia recoge (a partir del estudio "La Bíblia Valenciana" de Jordi Ventura, 1993, ediciones Curial, que examinó las actas del juicio inquisitorial) lo que probablemente sucedió. Los impresores empezaron a trabajar con la traducción de Bonifaci Ferrer, el hermano de San Vicente Ferrer, pero él había muerto 60 años antes y su lenguaje quedaba muy anticuado, lleno de arcaísmos. Un noble humanista, Berenguer Vives, aportó otra traducción, que fue corregida por Daniel Vives, un judío converso que colaboró con el inquisidor Borrell en la corrección, tanto de sentido como ortográfica.
Al final, se sentenció que el culpable de los textos problemáticos era Daniel Vives, que fue el único condenado y con poco severidad, según detalla el documental "La Biblia Valenciana", de Enrique Pallás, que cubre todas las vicisitudes de este texto, dramatizando las declaraciones del juicio. Sin embargo, Daniel Vives, añade el documental, huyó de Valencia escapando de la Inquisición, se refugió en Perpiñán (que también pertenecía a la Corona de Aragón) y allí fue detenido, juzgado y quemado en la hoguera en 1522, cuarenta años después de su trabajo en la Biblia valenciana.
Documental de casi una hora que recoge las peripecias históricas de esta biblia
Exposición hasta el 27 de febrero
La exposición «Bíblia i cultura» en Vila-real se puede hasta el 27 de febrero de 2019 en el Museo de la Ciudad Casa de Polo de Vila-real, de martes a sábado, de 10 a 13 h y de 17 a 20 h. La muestra está formada por 33 paneles organizados en tres bloques, con el fin de dar a conocer la Biblia de una manera sencilla y didáctica.
La exposición pone de relieve el texto y su mensaje, su recorrido hasta hoy en día, sus lenguas originales y la variedad de las múltiples traducciones a más de 3.000 lenguas diferentes de todo el mundo.
Además, se exhibirán cerca de 150 ejemplares de biblias en idiomas representativos de los cinco continentes, acompañados por formatos curiosos y una sección de facsímiles e históricos.
La exposición forma parte de la programación de las Jornadas: Traducción y Literatura Religiosa Medieval. "Estas Jornadas comprenderán una serie de conferencias impartidas por especialistas en lengua y literatura, que aportarán un punto de vista histórico y literario y le darán una visión centrada en la tradición de nuestras comarcas", apunta el concejal. La asistencia a las Jornadas estará reconocida con medio crédito universitario por la Universitat Jaume I.
Programa de las jornadas de traducción bíblica del 16 y 23 de febrero, aquí en PDF