Desde el 7 de noviembre hasta el 31 de diciembre el Museo de la Nación de Perú albergará la exposición fotográfica “Ayaviri: Testimonio de devoción, arte y tradición”, sobre la rica historia religiosa y cultural de esta diócesis, peculiar por su insólita altura, ya que está ubicada a 4.000 metros sobre el nivel del mar.
El evento es organizado por la Universidad Católica San Pablo, la Prelatura de Ayaviri (Prelaturaayaviri.org, el Instituto de Pastoral Andina y el Ministerio de Cultura de Perú, y “permitirá apreciar los aspectos artísticos de la Catedral de Ayaviri, la actividad religiosa y cultural entorno a la fiesta de la patrona del pueblo Nuestra Señora de la Altagracia, así como la vida cotidiana del pueblo”.
Los organizadores informaron que el responsable de las imágenes es el joven periodista y fotógrafo, Rodrigo Rodrich Portugal. “Él ha seleccionado 25 fotografías del inmenso registro que realizó en su última visita a Ayaviri para exponerlas en esta muestra”.
“A su trabajo se suman 13 piezas, entre fotos y textos, que permitirán conocer el valor arquitectónico de la Catedral de Ayaviri, además de sus retablos y altares barrocos, así como la pintura mestiza que este templo alberga”, añadieron.
El 07 de noviembre también se presentará el libro “La Catedral de Ayaviri en el tiempo”, editado por el Fondo Editorial de la Universidad Católica San Pablo de Arequipa. Este texto reúne un completo estudio histórico, arquitectónico y artístico de este templo desde el siglo XVI a la actualidad. La presentación se realizará a las 18.30 horas en el tercer piso del Museo de la Nación.
Este trabajo fue realizado por el historiador Carlos Zegarra Moretti, miembro del Instituto de Pastoral Andina. Gran parte de la información ha sido obtenida de fuentes inéditas extraídas del archivo histórico de la Prelatura de Ayaviri.
La Iglesia San Francisco de Asís (Catedral de Ayaviri) fue declarada monumento nacional en 1941. Con esta exposición, los organizadores también buscan difundir los valores patrimoniales de este templo, en aras a su puesta en valor.
Hace pocos años la diócesis celebró sus primer medio siglo como iglesia particular.