El éxito multitudinario de la miniserie The Bible, cuyo estreno a través de History Channel congregó a más de 13 millones de espectadores (en España fue emitida como La Biblia por Antena 3, cosechando en su final un 17,1% de cuota de pantalla y tres millones de espectadores), convenció a sus productores de que una adaptación cinematográfica a gran escala y repleta de épica llenaría los cines.
Meses después, el sueño de Roma Downey y Mark Burnett, los productores de la miniserie, está cerca de hacerse realidad. El estudio Fox confirmó esta semana que la cinta, titulada Son of God [Hijo de Dios], se estrenará el 28 de febrero y se basará en la miniserie, aunque incluye material no visto hasta ahora, según dijo el actor que encarna a Jesucristo en la cinta, el portugués Diogo Morgado.
"Se rodó al mismo tiempo que la miniserie. Se capturaron varias secuencias con distintos ángulos y cámaras, así que aparecerán escenas nuevas y a otras se les hará un tratamiento diferente", comentó Morgado vía telefónica desde Portugal. "Sobre todo hay varios momentos protagonizados por Jesús que no se pudieron incluir en la serie", agregó.
The Bible, de 10 capítulos y con un metraje de 10 horas, se despidió el 31 de marzo con 11,7 millones de espectadores. Ahora, su adaptación cinematográfica, dirigida por Christopher Spence, se enriquecerá con la banda sonora de Hans Zimmer y unos efectos visuales de última generación, según el comunicado de Fox.
El estudio promete una recreación de los humildes orígenes de Jesús y sus enseñanzas pasando por su crucifixión y resurrección.
"No esperaba que fuera a convertirse en un éxito tan grande", admitió Morgado. "Cuando me hablaron por primera vez del proyecto no me podía creer que un canal de televisión por cable quisiera adaptar toda la Biblia. Poder convertir ese trabajo en una película es abrumador", afirmó.
El largometraje tendrá una duración aproximada de dos horas. Con él, Downey y Burnett han logrado, como era su intención, que la película se pueda ver en la gran pantalla como una experiencia compartida para las familias.
"Vivimos en unos tiempos muy visuales y hay mucha gente joven que no conoce la Biblia ni sabe que se trata del libro más importante de la humanidad", apuntó Morgado. "Tampoco saben realmente quién es Jesucristo. El cine ofrece la manera más espectacular de ver esta historia, sin interrupciones como en la televisión. Es un gran resumen de los momentos más decisivos de Jesucristo en la Biblia", añadió.
El clásico de Cecil B. DeMille Los Diez Mandamientos (1956) y la serie para televisión Jesús de Nazaret (1977) son las obras bíblicas que más apasionan a Morgado, quien cree que Son of God "tiene calidad para estar a ese nivel". "El tiempo la pondrá en su lugar", recalcó.
El intérprete confiesa que éste es sin duda el papel "más duro" de su carrera. Es consciente de que acarrea "una responsabilidad enorme" y no duda en admitir que es "el gran reto" de su vida.
"Siento una presión enorme sobre los hombros, aunque yo soy el más exigente porque crecí en un país cristiano y tengo mi propia fe. Respeto la temática de la obra. Fue duro contar una historia que la gente ya conoce, por eso debíamos encontrar la manera de ofrecer algo nuevo y fresco, sin dejar de conectar con un espectador que espera ver ciertas cosas", declaró.
Morgado, un ex modelo que se dio a conocer en series y películas de su país, pasó a engrosar la lista de actores que han dado vida a Jesucristo, como ya hicieron Max Von Sidow, Christian Bale, Robert Powell, Willem Dafoe o Jim Caviezel, entre otros.
"Traté de ser lo más universal posible", sostuvo. "Aportar sus principales cualidades: amor, compasión y esperanza. Ese es el mensaje básico de Jesús e intenté extraerlo todo el rato. Su bondad y nobleza, su sonrisa en un pueblo donde nadie lo conoce, son elementos magnéticos", indicó.
La miniserie causó cierta polémica por el parecido físico entre el personaje de Satán, interpretado por el actor marroquí Mohamed Mehdi Ouazani, y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, provocando un debate acerca de la posible existencia de un mensaje político. Para Morgado, se trató de una "broma de humor negro que nació en las redes sociales". "Creo que no hay que darle mayor importancia. A la gente se le olvida que es uno de los actores más famosos de Marruecos tratando de hacer el mejor trabajo posible", explicó.