"Ésta será una magnífica escena final para una película sobre su vida hasta el momento en que fue elegido Papa": así pensó Christian Peschken, director, productor y guionista alemán de 57 años, cuando vio salir a Francisco en la loggia de San Pedro el 13 de marzo pasado.
Y en seguida se puso manos a la obra, según revela Joseph Pronechen en el National Catholic Register. Tanto, que la película ya tiene título (El amigo de los pobres. La historia del Papa Francisco) y una inversión inicial que pone un grupo inversor europeo: 25 millones de dólares.
No será un biopic, sino "una película sobre una persona que siguió la llamada de Dios y se convirtió en pastor de hombres, un hombre con una misión y con un destino", explica Peschken: "Le retrataremos como es, una persona que constantemente señala a Jesús y al mensaje de Jesús, de amor y responsabilidad con el prójimo, una persona que pone a Jesús en primer lugar, y todo lo demás en segundo plano".
El cineasta germano ha contactado para el proyecto con el vaticanista Andrea Tornielli, el guionista español Antonio Cuadri y el galardonado italiano Vittorio Storaro para la fotografía, así como con Sergio Rubin, autor del libro-entrevista con el cardenal Jorge Mario Bergoglio El jesuita, publicado en España bajo el título El Papa Francisco tras su elección como sucesor de Pedro.
"Confiamos y buscamos en tener el mayor impacto posible en Estados Unidos", confiesa Christian, a través de la distribuidora AMG Films y sus contactos con la Warner. No se trata de hacer una película "católica", añade, sino una película que "hable a todos, queremos llegar a las masas, que nadie se quede fuera". Eso sí, aclara, el catolicismo que no estará en la etiqueta sí estará en el contenido: "Al mostrar su vida, automáticamente transmitiremos el mensaje de la Iglesia católica, la Iglesia de Cristo".
La película se rodará en inglés, y en Argentina y en Cinecittà, en Roma, el mayor estudio de Europa, "por proximidad a la tumba de Pedro: creo que el Espíritu Santo nos ayudará a cumplir nuestra misión". Una misión que ya tiene fecha: quieren que el pase en el Vaticano ante el Papa sera el 17 de diciembre de 2014, fecha de cumpleaños de Francisco.
Christian Peschken lo ha sido todo en la profesión: cámara, guionista, director, productor... Trabajó en su país, en cine y televisión, hasta 1989, cuando se trasladó a Hollywood. Trabajó durante quince años en producciones de tipo medio pero en relación con "grandes" como la Paramount o la Universal y con actores como Martin Sheen, Rod Steiger o Scott Glenn. A partir de 2006, y sobre todo tras su conversión al catolicismo, ha estado vinculado sobre todo a proyectos de evangelización, trabajando sobre todo con la EWTN.
Él mismo ha contado que en su conversión tuvo mucho que ver la televisión de la Madre Angélica. Realmente Christian Peschken es un hombre salvado por el zapeo...
En efecto, todo comenzó cuando en 1994, pasando de canal en canal una noche de insomnio, recaló en el programa de una telepredicadora con el pelo rosa que "blandía" una Biblia y hablaba de Jesús. "Fue mi primer contacto real y consciente con el cristianismo", recuerda: "Antes de ser cristiano, yo sólo rezaba a Dios cuando necesitaba dinero, quería comprarme un nuevo Corvette o tenía que pagar mi exclusivo apartamento en Burbank".
Se aficionó a los telepredicadores y los seguía con frecuencia, hasta que un día de 1999, siguiendo las instrucciones de uno de ellos, se arrodilló en su cuarto: "Me puse de rodillas ante el televisor y recé aquella oración para aceptar a Jesucristo como mi Dios y Salvador". Se comprometió entonces con un ministerio de predicación, Los Mercenarios del Señor, que atendía a los sin techo de Los Ángeles.
Durante ese tiempo quiso vincularse a alguna iglesia "no denominacional", término que designa comunidades protestantes sin adscripción a las grandes corrientes tradicionales: luteranos, metodistas, episcopalianos, presbiterianos, evangelistas, etc.: "Pero nunca me sentía cómodo, ya fuese por la música tan alta, por el rollo emocional... No me sentía en casa".
¿Cuándo cambió todo? Fue en 2005, durante la agonía de Juan Pablo II, cuando se enteró de que el Papa Wojtyla había pedido que se leyesen unos versículos de los Evangelios sobre Jesús en Getsemaní: "Fue la primera vez que vi el vínculo entre la Iglesia católica y Jesús".
Y en 2007... un nuevo zapeo le invitó a dar un paso más. Ya de vuelta en Alemania, donde trabajaba en una canal cristiano de televisión, recaló en el programa de Marcus Grodi en EWTN: "¡Era tan diferente a los programas evangélicos...! La gente hablaba en él de su conversión al catolicismo. Fue la primera vez que me cuestioné mi fe cristiana. Me sentía muy confuso. Si la Iglesia católica era la verdaderamente establecida por Jesús, como ellos decían, ¿qué hacer ahora?".
Peschken tomó el mejor atajo, aunque en aquel momento no lo sabía: "Hablé con mi mujer y nos dijimos: ¿Por qué no empezamos a rezar el rosario?". Empezaron a hacerlo por las mañanas y a seguir la programación de EWTN: "Lo que más me convencía es que esos católicos de la televisión parecían muy formados en la historia de su religión y no pedían dinero a cada momento".
Su esposa y él empezaron a vivir como católicos, sin serlo aún: rezaban el rosario, se santiguaban con frecuencia, veían la misa por televisión...
Y así hasta 2009, cuando rodó junto al padre Charles Irvin un documental sobre el Padrenuestro. Los ejecutivos de EWTN le pidieron que trabajase con ellos y empezó a hacer pequeños cortos de diez minutos sobre el catolicismo, que luego emitían las cadenas católicas.
Hasta que el 11 de febrero de 2011, Nuestra Señora de Lourdes, Christian y su mujer fueron oficialmente recibidos en la Iglesia, en la parroquia de San Estanislao de Milwaukee.
"Los medios son el campo de batalla de la fe hoy más que nunca. Cambian las ideas de la gente sobre la vida y la religión organizada", sostiene Peschken. Su vida es la mejor prueba de ello.