El pasado sábado, 12 de junio, fiesta del Inmaculado Corazón de Jesús, el Arzobispo Primado de Toledo, monseñor Francisco Cerro Chaves consagró la ciudad de Talavera de la Reina al Corazón de Jesús. Aquí la información:
1929. El Cardenal Segura en el Ayuntamiento de Talavera de la Reina
No era imposible que durante el pontificado del cardenal Pedro Segura no se levantase un monumento al Corazón de Jesús en Talavera de la Reina. Se le echó de Toledo y de España sin poder levantarlo en la Ciudad Imperial... pues aquí, podía haber sucedido lo mismo. Y aunque no hayamos encontrado documentación que avale esta afirmación, si sabíamos que el Ayuntamiento había entronizado un cuadro del Corazón de Jesús y rezado la consagración.
Aquí está la crónica.
La Archidiócesis está inmersa en la conmemoración, como toda la Iglesia de las bodas de diamante por la proclamación del dogma de la Inmaculada (1854-1929). El Castellano dice en sus páginas del 18 de diciembre de 1929, «ha cientos de años que nuestra amada "Morenita" no paseaba, triunfal y mayestática, por las calles de Talavera». La Virgen del Prado salió el domingo 15 de diciembre de 1929 por las calles de la ciudad de la cerámica en procesión extraordinaria. Las imágenes de Asociaciones, parroquias y movimientos la acompañaron a lo largo del cortejo.
«La Niña María, con las alumnas pequeñas de las clases de la enseñanza. Imagen de Nuestra Señora de la Consolación, con el colegio de San Ildefonso (MM. Agustinas) […]. El recorrido por el paseo del Prado fue verdaderamente triunfal».
ENTRONIZACIÓN DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN EL AYUNTAMIENTO
«A las tres y media de la tarde llegó el señor Cardenal a la Casa Ayuntamiento. Le esperaban el alcalde señor Justiniano López Brea con todas las autoridades. Al apearse Su Eminencia del automóvil, la banda municipal interpretó la Marcha Real
El señor Cardenal pasó al despacho del alcalde, donde en un altarcito primorosamente adornado estaba el precioso cuadro del Sagrado Corazón. Su Eminencia se revistió de roquete y rezó las preces del ritual. Acto seguido la grandiosa fotografía, obra de Kodak, fue llevada procesionalmente hasta el salón de sesiones; fueron portadores el alcalde señor Brea y el diputado señor Prieto; un hijo de este, el pequeño Luquitas, abría marcha, llevando en sus manos un crucifijo.
El señor Cardenal, una vez colocado el cuadro en su sitio pronunció una breve plática: dijo que este era el digno coronamiento de esta jornada gloriosa. Acto este, grande para la vida de un pueblo: Talavera demuestra con ello que avanza por el camino del verdadero progreso; y en fama sobremanera consoladora ha culminado con la venida triunfal de la Virgen del Prado a la ciudad, y es prueba de ello también esta entronización […].
El Corazón de Jesús devolverá esta consagración en dichas y bendiciones para este pueblo.
Acto seguido, el alcalde señor Brea (bajo estas líneas) leyó el acto de la consagración».