Año del Señor 2023

10 de octubre
 
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día. 
 
TODO TIENE UN SENTIDO
 
Hay momentos del día en los que uno no tiene que hacerse grandes preguntas. A mí me sucede cada vez que me levanto: voy aprendiendo que cuando suena el despertador, no es momento de pensar en el sentido de la vida, sino de levantarse sin razonar mucho y comenzar a espabilarse.
 
Recuerdo a un sacerdote que nos decía en plan de broma que después de haberse comido una fabada asturiana, uno se siente como si se le acabara la vocación… ¡Cómo me impresionó la primera vez que lo escuché! Pues ya era bien experimentado en la vida…
 
Y es que el día a día es un proceso continuo de búsqueda de sentido, de lucha, de superación… Pero, para salir victoriosos en esta lucha, es clave ir conociéndonos a nosotros mismos, descubrir los puntos débiles y llegar a descubrir lo que realmente somos. Porque ahí experimento cómo me ama el Señor. El sentido de la vida no depende de mis fuerzas. Más bien depende de lo que el Señor quiere hacer de mí. ¡En Él está el sentido de todo!
 
Jesús, en los años de su vida pública, no solo curó a muchos enfermos y anunció la buena noticia… también hizo algo muy importante: enseñar a los apóstoles a conocerse a sí mismos.
 
Un ejemplo claro fue Pedro: cuando este todavía no terminaba de conocerse, se mostraba fuerte e impulsivo. Incluso llegó a decirle “aunque los demás te abandonen, yo no te abandonaré…”. Pero Jesús, que lo conocía, lo puso en su realidad: “en verdad te digo que antes de que cante el gallo me habrás negado tres veces” (Mt 26, 33-35).
 
Jesús permitió que sucediera, pero no lo dejó ahí, sino que lo rescató con su mirada de la desesperanza de sí mismo. Y más tarde, en una de las apariciones, lo capacitó para que ya no solo contara con sus fuerzas, sino que descubriera que es el Señor quien lo lleva a cabo.
 
También la tarea que nos encomienda a nosotros es superior a nuestras fuerzas, pero el Señor va haciendo que nos conozcamos para poder derramar su Amor sobre nosotros, capacitándonos para llevar a cabo Su obra.
 
Hoy el reto del amor es buscar el sentido de tu vida. Sí, todo tiene un sentido. No estás aquí por casualidad, y tu felicidad depende en gran parte de ir encontrando cada día la respuesta a esta gran pregunta.
 
VIVE DE CRISTO
 
¡Feliz día!