Ayer por la tarde el Rector del Seminario Menor de Santo Tomás de Villanueva de Toledo, don Juan Félix Gallego Risco (a la izquierda de la foto), en presencia del arzobispo primado, monseñor Francisco Cerro y del Rector del Seminario, don Álvaro García Paniagua, presentaban El libro del monaguillo.
Se trata -explicó don Juan Félix Gallego- de un proyecto en el que venimos pensando y trabajando desde hace varios años y en el que han intervenido varios equipos de formadores. Este es uno de los aspectos más hermosos de esta obra: su elaboración es el resultado de un trabajo en común, en el que han colaborado equipos sucesivos de formadores.
Su publicación coincide providencialmente con los inicios del presente curso pastoral en nuestra Archidiócesis de Toledo, que está dedicado a los sacerdotes. Además el Seminario Menor de Toledo está a punto de cumplir su primer centenario. Es el único en España que se mantiene como Seminario desde su fundación, siendo su primer rector el beato José Sala Picó, mártir de la persecución religiosa (la mayoría de los seminarios menores o han desaparecido o se han convertido en colegios diocesanos). Lo forman 46 seminaristas. En el Seminario Mayor, tenemos 78 seminaristas.
El libro del monaguillo quiere ser -afirma el Rector del Seminario Menor- un granito de arena que contribuya a seguir creando y manteniendo ese clima vocacional necesario para que el Señor siga encontrando respuestas de disponibilidad y servicio entre los niños a su llamada para el ministerio sacerdotal.
¡Cuántos sacerdotes hemos sido monaguillos! Preguntando uno de los primeros días de este curso, en una reunión general con todos los seminaristas menores, cuántos habían sido monaguillos, los cuarenta y cinco seminaristas levantaron la mano.
El libro del monaguillo desea ofrecer un material para contribuir a este fin. Por eso, ciertamente, no faltan en él las necesarias indicaciones prácticas para que los niños desempeñen bien su servicio al altar como monaguillos, pero el enfoque del libro es más amplio, su objetivo supera lo meramente inmediato y mira a la formación cristiana y vocacional de sus destinatarios. Por ello, su contenido está distribuido en cuatro bloques temáticos:
- Formación litúrgica práctica
- Pequeñas catequesis sobre la vivencia de las virtudes cristianas, asociadas a breves reseñas de vidas de santos que las han encarnado.
- Una selección de oraciones.
- Una última sección que busca ofrecer una síntesis de todo lo aprendido y orientarlo hacia el compromiso y el planteamiento vocacional.
El libro se convierte así en una itinerario catequético-espiritual que puede acompañar a los niños en los años posteriores a la primera comunión para ayudarlos a vivir más cerca de Jesús y a crecer en su conocimiento y amistad...
Durante su intervención el Rector del Seminario Menor agradeció especialmente la colaboración, totalmente desinteresada, del diácono don Francisco José Gómez Sánchez por todos los dibujos que acompañan los textos, y también al sacerdote don Víctor Carmena por la imagen de san Tarsicio que ilustra la portada. Aquí algunos de esos dibujos.