El padre Jorge M. Ayala Martínez, C.M.F. (Corella, Navarra), profesor titular de filosofía de la Universidad de Zaragoza, es conocido por sus trabajos relacionados con el hispanismo filosófico, en su vertiente medieval y moderna. Ha escrito una monumental obra, titulada: Pensadores aragoneses. Historia de las ideas filosóficas en Aragón (2001). Sus trabajos sobre Baltasar Gracián son muy citados por los gracianistas. Otros autores estudiados por Jorge Ayala son Maimónides, Luis Vives, Huarte de San Juan, Miguel de Molinos, Andrés Piquer, Joaquín Costa, Ortega y Gasset, Xavier Zubiri. En la actualidad es coordinador de la Revista Española de Filosofía Medieval y secretario de la Sociedad de Filosofía Medieval (Zaragoza).

Ahora nos habla, con su don de comunicador, sobre la famosa Canción del Misionero.


 

Santiago Mata grabó este video en 2017, en el monumento de los mártires. El padre Carlos Latorre Giral, C.M.F. canta la estrofa con el verdadero tono y hace una pequeña explicación.

 

Como nos explica en la conferencia el padre Ayala el himno Jesús, ya sabes, soy tu soldado, cuyo verdadero título es Canción del Misionero, es obra de principios del siglo XX, con letra del padre Agapito Ajuria y música del padre Vidal Bandrés. Este vídeo recoge su interpretación, grabada en julio de 2019, por la Congregación Mariana de la Inmaculada y Santa Juana de Lestonnac.

Jesús ya sabes, soy tu soldado
siempre a tu lado presto a luchar,
contigo siempre y hasta que muera
una bandera y un ideal.
¿Y qué ideal? (Bis)
Por Tí Rey mío, la sangre dar.

Desde que mi alma, los lazos rotos,
hizo sus votos ante tu altar,
mi pecho siente sed infinita,
mi mente agita gran ideal.
¿Y qué ideal? (Bis)
Por Tí Rey mío, la sangre dar.

No me detengas en mi carrera
voy sin espera por Tí a luchar
que a nadie temo, nada me espanta
pues me agiganta el ideal.
¿Y qué ideal? (Bis)
Por Tí Rey mío, la sangre dar.

Si en el camino huestes malditas
¡atrás! me grita ¡atrás, atrás!
Si me disparan sangrientas balas
darame alas el ideal.
¿Y qué ideal? (Bis)
Por Tí Rey mío, la sangre dar.

Con tus auxilios seré potente
David valiente contra Goliat
saldré al combate y herida honda
le haré con la honda de mi ideal.
¿Y qué ideal? (Bis)
Por Tí Rey mío, la sangre dar.

Pues ya lo sabes, soy tu soldado
siempre a tu lado presto a luchar,
contigo siempre y hasta que muera
una bandera y un ideal.
¿Y qué ideal? (Bis)
Por Tí Rey mío, la sangre dar.

Acaso me oigas sólo y tendido
dar un quejido, mi postrero ¡ay!
Jesús entonces habré vencido,
y habré cumplido con mi ideal.
¿Y qué ideal? (Bis)
Por Tí Rey mío, la sangre dar.

Virgen María, Reina del Cielo,
Dulce Consuelo dígnate a dar
cuando en la lucha tu fiel soldado
caiga abrazado con su ideal
¿Y qué ideal? (bis)
Por tí mi Reina, la sangre dar.