Suele acontecer en la vida que lo que más fácil y pronto se olvida, es aquello que todos dan por obvio y elemental. Al ver ciertos comportamientos de la casta política, el pueblo llano percibe que lo que falla es lo más claro y evidente. He aquí algunos casos, sin ser exhaustivos, que podrían servir de test para todos:
-Un buen político busca el poder para servir a otros; no para medrar o enriquecerse uno.
-Un político mentiroso no es de fiar. No sirve para político. Contagia a su partido.
-Lo prioritario en un político es buscar el bien común, no el de su ideología o partido.
-Los preferidos de un político cabal deben ser los ciudadanos más pobres y marginados.
-El buen político aplaudirá la obra bien hecha, aunque la realicen los contrarios.
-Todos los políticos deben tener “tolerancia cero” con los corruptos. Cordón sanitario.
-El político que antepone el interés a su propia conciencia, está de sobra en política.
-El buen nombre de España debe estar por encima de todo y de todos.
-El buen político es el que suma y multiplica esfuerzos; el malo, resta y divide.
-El político responsable siempre respeta la Religión y la Tradición de su pueblo.
-El político que no es fiel a su mujer, no es de fiar en las promesas al pueblo.