Año del Señor 2023

1 de septiembre 
 
Hola, buenos días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día. 
 
"VUELA"
 
Un pájaro dentro del refectorio intentaba salir por una ventana una y otra vez. Me acerqué a abrirla más y, en lugar de esperar y salir, asustado, voló lejos.
 
Después de un rato, regresó y en su segundo intento encontró la libertad. Lo vi volar lejos, alto... hasta que lo perdí de vista.
 
Muchas veces, el obstáculo que nos impide volar está dentro de nosotros mismos. "No puedo", "no valgo", "otro día más"... la forma en que nos hablamos y pensamos de nosotros mismos cierra nuestra propia ventana, la ventana que nos lleva a la libertad. ¿Cómo abrirla?
 
En Cristo, Él te la abre de muchas maneras: con su amor para que puedas decirte a ti mismo: "soy amado, único, especial"; Él te la abre ante la rutina si cada día te dices: "sé que hoy me vas a regalar vivir algo sorprendente" y lo verás vivo en esa llamada, en ese gesto... Los "no puedos" tampoco te impedirán volar, no serán obstáculo, porque desde Él verás otros dones maravillosos en ti.
 
El optimismo no depende de nosotros, se nos da; se nos regala y va más allá de nuestros propósitos. Surge de la experiencia de que hay un Dios que vela por ti, que te conoce por tu nombre y actúa e involucra en tu vida. El optimismo se fundamenta en la confianza; en abandonarte en sus manos.
 
Es cuestión de confianza más que de circunstancias.
 
Con Cristo, la vida es un "sí" continuo; Él te abre la ventana de par en par para que puedas volar.
 
Si tu mirada y tu corazón están en Cristo, ¿qué te impide volar? Puedes, vales, eres... porque Él te ama.
 
Hoy, el reto del amor es que vayas a la ventana abierta y vueles. ¿Piensas en sí o en no? Cuando sientas que no puedes, mira a Cristo y deja que cambie ese pensamiento en "sí"; ¡vuela!
Tu libertad está en Él.
 
VIVE DE CRISTO
 
 
¡Feliz día!