La Adoración Nocturna de Talavera de la Reina (Toledo) se prepara para celebrar su primer centenario. El próximo 30 de junio, monseñor Braulio Rodríguez Plaza, Arzobispo de Toledo y Primado de España, acudirá a la ciudad de la Cerámica para presidir la Eucaristía por este aniversario.
¡EN AQUELLA FELIZ NOCHE!
PRIMER CENTENARIO DE LA ADORACIÓN NOCTURNA DE TALAVERA DE LA REINA (TOLEDO)
1918· 7 de diciembre · 2018
1918· 7 de diciembre · 2018
La primera noticia que podemos recabar de la fundación de la Adoración Nocturna en Talavera de la Reina la localizamos en el libro de Actas de las Marías de los Sagrarios. Con fecha del 3 de octubre de 1918 leemos: «También nos manifestó [el beato Saturnino Ortega Montealegre, que] se ha de establecer en breve en esta ciudad la Adoración Nocturna Española contando ya con cuarenta y tantos socios, y animándonos para cooperar cuanto esté a nuestro alcance por el buen resultado; siendo el mismo fin que el de las Marías de los Sagrarios: adorar a Cristo, nuestro Señor en la Sagrada Eucaristía».
Por su parte, en El Castellano del 11 de diciembre de 1918, aparece este breve reseña: «El día 7, a las diez de la noche, tuvo lugar en la iglesia parroquial de Santa María, la bendición y jura de la bandera, imposición de distintivos a los oradores y vigilia inaugural de la Sección. Apadrinó la bandera D. Félix Moro Vallejo, y según estaba anunciado, tomaron parte del acto representaciones de Plasencia, Almendralejo, Consuegra, Fuensalida y Toledo. El acto resultó emocionante y lucido en extremo».
Detalle de la foto anterior. En los años siguientes, en la procesión del Corpus, junto a los estandartes de las parroquias y asociaciones religiosas, saldrá la bandera de la Adoración Nocturna.
Es el siervo de Dios José García-Verdugo (bajo estas líneas), mártir de la persecución religiosa -cuya causa de beatificación está incoada en el Arzobispado de Toledo-, quien escribió -en febrero de 1919- una crónica completa sobre la primera vela nocturna al Señor Sacramentado en la ciudad de la Cerámica.
«En la noche del 7 al 8 de diciembre se inauguró en esta ciudad (de Talavera de la Reina) la Sección Adoradora Nocturna, bajo la advocación de la Santísima Virgen del Prado, patrona queridísima de este pueblo. Cincuenta y cuatro socios cuenta la nueva Sección. El número de fieles que llenaban la antigua colegiata, los adoradores de otras secciones que con nosotros adoraron al Señor en aquella feliz noche y las banderas congregadas en torno del Sagrario, contribuyeron al mayor esplendor de la fiesta. Junto a la nueva bandera ondearon, además de la diocesana de Toledo, las de Plasencia, Fuensalida, Consuegra y Almendralejo, y asistieron representaciones de Madrid y Pamplona. Recibiéronse telegramas de adhesión del Consejo Supremo y de la Sección de Brihuega.
Celebráronse los actos todos conforme a las instrucciones del ritual y bajo la dirección de los adoradores de la Sección toledana. Después de la exposición, nuestro amado Arcipreste [beato Saturnino Ortega Montealegre] que, movido de su celo no cesó de trabajar durante largo tiempo por establecer en esta ciudad nuestra obra eucarística, nos dirigió una plática llena de unción impregnada de amor y de esperanzas.
Por la mañana, a pesar del rigor de la noche y lo temprano de la hora, acudieron a tomar el Pan Divino más de 400 personas, entre ellas los niños acogidos en el Asilo de San Prudencio con las Hermanas de la Caridad que con cariño de madres por ellos velan.
La gente, que llenó la iglesia en las primeras horas de la Vigilia, no abandonó por completo el templo. Durante toda la noche más de 30 señoras, casi todas Hijas de María, adoraron al Señor con el mayor recogimiento.
Terminada la Vigilia, y a las seis y media de la mañana, nos reunimos los adoradores en el espacioso comedor del Asilo de San Prudencio y se sirvió un frugal desayuno. Sesenta y cinco personas fueron sentadas a la mesa» (Lámpara del Santuario, nº L, febrero de 1919).
El Siervo de Dios en la plaza de San Pedro de Roma, en 1935
Finalmente, la parroquia de Santa María la Mayor de Talavera de la Reina (Toledo) conserva una orla que, por orden del Consejo Supremo de julio de 1940, manda se tenga presente a los hermanos adoradores muertos en los días de la persecución religiosa. Tres sacerdotes: el beato Saturnino Ortega Montealegre, los siervos de Dios Félix Jiménez y Alejandro Montero. Y cuatro seglares: siervo de Dios José García-Verdugo, Tomás Gómez, Ángel Fernández-Gaytán y Víctor Benito Zalduondo.
Procesión del Corpus del año 1924. La foto salió publicada en El Castellano Gráfico del 29 de junio de 1924. La Custodia -decía la crónica- fue llevada en una magnífica carroza galantemente cedida por el vecino pueblo de Alcaudete.