Y un viernes más, heme aquí con el “Día cualquiera” que algunos de Vds. habrán podido escuchar esta madrugada en el interesante programa que dirige Javier Angel Ramírez “Diálogos con la Ciencia”, en Radio María, una sección en la que les narro los episodios interesantes que se han producido cualquier año de la historia pero necesariamente tal día como hoy, o sea, un 30 de octubre. Pues bien…
Efemérides
Es un día importante en la historia de la expansión musulmana por el mundo, porque en un platillo de la balanza, en 637, con su toma tras la batalla del Puente de Hierro, la ciudad de Antioquía cae bajo el Califato Rashidun, así llamado el reinado de los cuatro primeros califas, Abu Baker, Omar, Utman y Alí, también conocidos como los califas ortodoxos, los únicos aceptados por todas las ramas del islam, pues luego vendrá la separación entre sunitas y chiítas, la llamada “Primera fitna” de fitna=división, la primera de una serie de cuatro, a las que añadir las andalusíes, otras tres, que dan lugar a lo que generalmente conocemos como “reinos de taifas”, siendo así que taifa significa facción en árabe.
En el otro platillo en cambio, en 1340 Alfonso XI de Castilla, Alfonso VI de Portugal y Pedro IV de Aragón, obtienen una importantísima victoria sobre los benimerines norteafricanos y el rey Yusuf I de Granada en la batalla del río Salado, en Cádiz, una batalla que afianza el dominio castellano del estrecho de Gibraltar y da al traste con una nueva invasión musulmana desde Africa, que efectivamente, no volverá a ocurrir ya nunca. En resumen, cuatro habrían sido las grandes invasiones musulmanas de la península, todas desde Africa. La inicial de Tarik, la de los almorávides, la de los almohades y la de los benimerines… que los españoles contemplamos la presencia musulmana en España de una manera excesivamente simplificada, y no diferenciamos bien entre las distintas invasiones que se produjeron… algo así como si los egipcios hablaran de las invasiones cristianas del s. XIX y no, como lo hacen, de la francesa y de la inglesa.
En 1813, en Pamplona, capitulan las tropas francesas. Se puede decir que finaliza la Guerra Franco Española o Francesada, mal llamada, por cierto, Guerra de la Independencia, pues España ya era independiente desde tiempo inmemorial. Ni siquiera se produjo la invasión de todo la parte europea del país, librándose la parte sur de Andalucía, Baleares y Canarias. Y por supuesto, no se invadió el inmenso territorio de la España transatlántica, tan española como la cisatlántica. La ocupación, además, fue muy breve, apenas cuatro años, y siempre cuestionada. La última batalla de la guerra tendrá lugar en Toulouse, con victoria española, y a nadie se le ocurre hablar de Guerra de la Independencia Francesa. Y por si todo esto fuera poco, lo que en realidad se pone en juego en la Francesada no es la independencia de España, que habría seguido siendo un reino independiente aunque la victoria final hubiera caído del lado bonaparte, sino un cambio de rey acompañado de un cambio de dinastía, tratándose pues, más de una guerra de sucesión que de una guerra de independencia.
En 1888, se firma el Tratado de Constantinopla, que declara el canal de Suez zona neutral bajo protección británica: el Imperio otomano permitía así la navegación internacional de forma libre a través del canal tanto en tiempos de paz como de guerra.
En 1922, dos días después de la Marcha sobre Roma, el rey Víctor Manuel III de Italia nombra primer ministro a Benito Mussolini. Mussolini estará al frente de los destinos italianos 21 años, hasta que en 1943 el mismo rey, en plena Segunda Guerra Mundial, lo cese para rendirse a los aliados, arrestándolo en el Hotel Campo Imperatore, en los Apeninos, de donde lo rescatará Hitler con el dispositivo llamado Unternehmen Eiche, Operación Roble en alemán, que dirige Otto Skorzeny. Mussolini es puesto entonces al frente de la llamada República de Saló en el norte de Italia, la única parte del país no ocupada por los aliados, y en esas está cuando es nuevamente apresado al final de la Segunda Guerra Mundial y fusilado sin juicio y junto a su amante Clara Petacci, por los partisanos italianos.
En 1928, en Gran Bretaña, y según consta en el cuaderno de laboratorio de Alexander Flemming, una placa de cultivo llama su atención: Flemming está descubriendo la penicilina, hallazgo con el cual se adentra en el maravilloso mundo de los antibióticos que tantas enfermedades curarán en adelante: uno de los grandes descubrimientos de todas las épocas en el mundo de la medicina. Los toreros españoles dedicarán al gran médico británico una estatua que puede Vd. ver en la plaza de toros de las Ventas, agradecidos por la cantidad de vidas que su descubrimiento salvará.
En 1938, en EE.UU., la dramatización radiofónica del relato “La guerra de los mundos” de H. G. Wells por Orson Welles, provoca el pánico nacional cuando miles de oyentes creen que se está produciendo una auténtica invasión alienígena procedente del planeta Marte.
Y aunque, a diferencia de lo ocurrido en Hiroshima y Nagasaki en 1945, sin víctimas mortales esta vez, es un día negro en la historia de la carrera nuclear, porque en fecha como la de hoy pero de 1951, en Nevada, Estados Unidos hace detonar la bomba atómica Charlie, de 14 kilotones; y en 1962, sobre el atolón Johnston en el océano Pacífico, la bomba Housatonic, de 8,3 megatones, dos de las 1.129 que detonará entre 1945 y 1992. Y en 1961, en Nueva Zembla, es el gobierno soviético el que hace explosionar la llamada Bomba del Zar, la bomba atómica más grande de la historia, de 50 megatones, cuatro mil veces más potente que la arrojada sobre Hiroshima.
Natalicio
En el capítulo del natalicio, nace en 1632, Christopher Wren, físico, matemático y arquitecto inglés que reconstruye Londres tras el importante incendio de 1666, diseñando hasta 52 iglesias, entre las cuales la catedral de San Pablo. Amén de ello destacará en el campo de la observación astronómica, inventará un pluviómetro y un reloj meteorológico, planteará el problema que dará origen a los Philosophiae Naturalis Principia Mathematica de Newton, y es uno de los fundadores de la Royal Society.
Y en 1735 el norteamericano John Adams, uno de los padres fundadores de los Estados Unidos de Norteamérica y segundo presidente de la misma, por el Partido Federalista.
Y es un gran día para la medicina, ya lo van a ver Vds., pues en 1857 nace Georges Gilles de la Tourette, neurólogo francés que describe la enfermedad llamada en su honor “síndrome de La Tourette”, a la que él llamó “la maladie des tics” “la enfermedad de los tics. ¿Y a que no sabe Vd. de donde viene la palabra “tic”? Pues un tic no es otra cosa que un trastorno involuntario compulsivo, T-I-C, o sea tic, descritos ya por médicos tan tempranos como Armand Trouseau, en 1873, o Jean-Martin Charcot, en 1888. En 1895, nace el bacteriólogo alemán Gerhard Domagk, nobel de medicina 1939 por el descubrimiento de la sulfonamida Prontosil, primera droga efectiva contra las infecciones bacterianas, autor de la obra “Pathologische Anatomie und Chemotherapie der Infektionskrankheiten”, Anatomía patológica y quimioterapia de las enfermedades infecciosas. Y el mismo día del mismo año, fíjense Vds. qué casualidad, el estadounidense Dickinson W. Richards, nobel también de medicina, éste en 1956, por el desarrollo del cateterismo cardíaco y la caracterización de una serie de enfermedades del corazón o cardiopatías. Y en 1900, el finlandés Ragnar Granit, nobel de medicina 1967 por sus descubrimientos sobre procesos visuales primarios, psicológicos y químicos en el ojo. Y en 1928, el estadounidense Daniel Nathans, nobel de medicina 1978 por sus investigaciones sobre la estructura de ADN del virus símico denominado Papovirus SV-40, el más simple conocido capaz de producir cáncer. Impresionante, como ven, el idilio existente entre el 30 de octubre y el nobel de medicina.
Y si hemos visto que es un día grande para la medicina, no lo es menos para la literatura, porque en 1821 nace Fiódor Dostoyevski, uno de los grandes exponentes de la novela rusa, autor de títulos insuperables como “Crimen y castigo”, “El jugador”, “El idiota” o “Los hermanos Karamazov”. En 1871, el francés Paul Valery, autor de “El cementerio marino” o “La joven Parca”. Y en 1910, el poeta y dramaturgo español Miguel Hernández, que preso durante nuestra Guerra Civil en una cárcel en la zona nacional, en ella morirá de tuberculosis con apenas treinta y un años de edad. Una pérdida irreparable para la poesía española y mundial. Entre sus muchas obras, la maravillosa “Elegía a Ramón Sijé”.
Obituario
En el capítulo del obituario, muere en 1626, Willebrord Snel van Royen, astrónomo y matemático holandés que trabaja en la determinación del tamaño de la Tierra, realiza mejoras en el método aplicado del cálculo, y formula la ley de la refracción que lleva su nombre.
Y ahora, dos españoles singulares, porque en 1799 muere el jesuíta Esteban de Arteaga, autor de “Investigaciones filosóficas sobre la belleza ideal”, importantísimo tratado de Estética, y de “Le rivoluzioni del teatro musicale italiano”, “Las revoluciones del teatro musical italiano”, donde propugna unificar poesía y música, escenificación y pantomima en una auténtica fiesta de las bellas artes, anticipándose así al llamado “Gesamtkunstwerk”, traducible como “obra de arte total” del compositor alemán Richard Wagner. Y en 1837, el español Francisco de Paula Marín y Grassi, hombre políglota y polifácetico, entre cuyas muchas actividades destaca la de botánico y horticultor, introduciendo en las Islas Hawai el cultivo de la piña que hoy es su seña de identidad, y el del algodón, el mango y la naranja, así como la ganadería caballar, y redacta un diario que es la mejor crónica del archipiélago.
En 1910 muere el suizo Jean Henri Dunant, Nobel de la Paz 1901, empresario que, testigo en 1859 de la agonía de los heridos en la batalla de Solferino en Italia, crea un cuerpo de voluntarios para socorrer a los heridos de guerra que no es otro que la Cruz Roja. La Convención de Ginebra sobre la Guerra de 1864 adopta algunos de sus postulados de humanitarismo militar.
Y en 1956, Pío Baroja, escritor español de la llamada Generación del 98, autor de obras como “Zalacaín el aventurero” y “Mala hierba”.
En 1963 muere el estadounidense Clifford Edward Berry, ingeniero que junto con John Atanasoff, crea el Atanasoff Berry Computer (ABC), considerado el primer computador digital y electrónico automático, precursor del famoso ENIAC, Electronic Numerical Integrator And Computer, Computadora e Integrador Numérico Electrónico, inaugurado el 15 de febrero de 1946, capaz de resolver 5.000 sumas y 300 multiplicaciones en un segundo, que ocupaba una superficie de 167 m², pesaba 27 toneladas, y elevaba la temperatura del local a 50 °C.
En 1975, Gustav Hertz, nobel de física 1925 por sus estudios sobre el paso de electrones a través de un gas, sobrino a su vez de Heinrich Rudolf Hertz, que descubre el efecto fotoeléctrico y la propagación de las ondas electromagnéticas, en cuyo honor se denomina “herzio” a la unidad de medida de frecuencia.
Y en 2009 Claude Lévi-Strauss, antropólogo y filósofo francés, fundador de la llamada “antropología estructural”.
Cumpleaños
Y como no podía ser de otra manera según hemos visto ya, con este día glorioso para la medicina, tenemos que felicitar hoy a un gran médico, el estadounidense Leland H. Hartwell, nobel de medicina 2001 por sus contribuciones a la comprensión del ciclo celular, que cumple 81. ¡Felicidades maestro! Y a otro nobel, el alemán Theodor W. Hänsch, que aunque fisico de formación y nobel de Física 2005, lo recibe por otra gran contribución al mundo de la medicina, la espectroscopia basada en el láser, que cumple hoy 79 años. ¡Felicidades maestro!
Y a Robert L. Gibson, astronauta norteamericano participante en cinco misiones STS de la NASA, que cumple 74.
Y al gran violinista ruso Shlomo Mintz, que cumple 63.
Y a nuestras guapas, hoy la modelo estadounidense Ashley Graham, perteneciente a la categoría denominada en el argot “plus size”, talla grande, de hecho pesa casi 100 kilos, profesión que alterna con una interesante pedagogía de la aceptación del propio cuerpo, que cumple 33
Hasta hoy, Semana Internacional del Desarme. Y una propuesta desde esta columna: ¿por qué no declarar tal fecha como la de hoy el día internacional o mundial de la medicina o de los médicos? Y como yo sé que a muchos de Vds. les gustan estas efemérides, pueden Vds. consultarlas en el medio Religión en Libertad, en la columna “En Cuerpo y Alma”, donde las colgamos para Vds. cada semana.
Y bien amigos, como siempre, que hagan Vds. mucho bien y que no reciban menos.
©L.A.
Si desea ponerse en contacto con el autor, puede hacerlo en encuerpoyalma@movistar.es. En Twitter @LuisAntequeraB