El diario El Mundo nos trae la noticia de la siguiente manera:
"Ha vuelto a pasar. El número de personas que nacen es inferior al número de personas que mueren, lo que ha provocado un nuevo saldo vegetativo negativo de hasta 32.132 personas durante la primera mitad de 2017. Los nacimientos han caído un 6,3% en este primer semestre, mientras que las defunciones han aumentado un 4,5%.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado este martes sus cifras correspondientes al Movimiento Natural de la Población, que dan cuenta de las bodas, bautizos y funerales registrados en los seis primeros meses del año"
El invierno demográfico está en pleno movimiento. Pocos hijos nacen al mundo. El número de ancianos sube como la espuma. La sociedad no protege a la familia y sus posibles hijos.
Y mientras esto es tan real, como las cifras citada, resulta que los peperos hacen una proposición de ley en el parlamento, que ha sido aprobrada con plena unanimidad.
Es el mismo diario quien lo expresa así:
"Los animales han sido los protagonistas en la sesión del . Y esta vez nada tiene que ver con que se hayan dicho 'burradas' o la Cámara Baja se haya convertido en un 'gallinero'. Es porque todos los partidos políticos han respaldado una para que los animales dejen de ser "cosas". Los "mejores amigos" para muchas personas reciben hasta ahora el estatuto jurídico de cosas, en concreto con la condición de bienes muebles en la actual regulación de los bienes del Código Civil. Esta propuesta consiguió una foto poco habitual en el Congreso: la unanimidad. Todos los diputados votando lo mismo.
El Congreso, medio vacío -con una afluencia escasa de diputados debido a las elecciones catalanas y a que había sesión en el -, ha aprobado la admisión a trámite de esta Proposición de Ley, y ahora comienza su camino parlamentario, donde puede sufrir modificaciones a través de enmiendas, que ya anunciaron las formaciones. Pero el respaldo de todos los partidos augura que será una normativa que verá la luz"
Las mascotas entran en la legislación sobre separaciones, divorcios...con el pleno aplauso parlamentario, aunque sea poco numeroso en sus presencias reales.
¿Hemos perdido el sentido común?
¿A qué sociedad nos conducen estos caminos?
Si alguien lo sabe que lo diga en los comentarios. Muchas gracias.
Tomás de la Torre Lendínez