Año del Señor 2024
22 de abril
 
Hola, buenos días, hoy Lety nos lleva al Señor. Que pases un feliz día. 
 
EL HUEVO QUE SE NOS RESISTIÓ
 
Era el día que nos tocaba cocinar y limpiar a fondo las cocinas. Mi compañera de cocina, sor María Jesús, me dijo que teniamos que cocer unos huevos para la comida. Justo acababamos de limpiar a fondo las cocinas así que sugerí hacerlos en el microondas. Ella me dijo: "Yo nunca lo he hecho pero…vale”. A lo que respondí: "No hay problema, busquemos en internet cómo hacerlo”. 
 
Busqué y vi que lo primero que necesitabamos era una huevera para microondas, pero como alternativa sugerían usar un vaso con el huevo dentro, cerrado con film y agujereado para que pase el aire. Preparamos todo y lo metimos en el microondas, pero ¡pum, pum! ¡Explotó en el microondas y nos ensució todo!
 
Lo intentamos de nuevo, esta vez leyendo más despacio las instrucciones. Donde ponía que se cascara el huevo pero…. volvió a suceder lo mismo. Esta vez no dentro del microondas, sino al sacarlo y ponerlo encima de la mesa. El huevo salió volando y lo peor fue… ¡cómo ensució las cocinas, la suciedad llegó hasta el techo!
 
La hermana me dijo: "Es que en internet no puedes confiar en lo primero que lees, tienes que saber dónde lees." Esto me impactó porque pensé que así puede ser nuestro camino de fe, si no lo cuidamos.
 
A veces nos dejamos llevar por teorías nuevas porque es lo que el mundo nos pide, o ponemos nuestra confianza en lo primero que leemos. Pero Jesús nos dice: "Yo soy el camino, la verdad y la vida."
 
En Jesús tenemos el Camino a recorrer, una mano que agarrar. Su camino es nuestra felicidad. A su vez, Jesús es la Verdad, nuestra referencia en el pensar, actuar y vivir. Él nos ha dejado la verdad para dar sentido a nuestra vida. Y también es la Vida, una vida no solo para ir tirando, sino para disfrutarla en plenitud.
 
Jesús quiere que seamos felices. En Cristo lo tenemos todo, es nuestro recurso para cada cosa que nos ocurra. Solo tenemos que acudir a Él. 
 
Hoy, el reto del amor es preguntar a Jesús a lo largo de tu jornada: "Jesús, ¿qué harías en este momento?" Y escúchale atentamente, porque Él siempre responde.
 
VIVE DE CRISTO
 
¡Feliz día!